El futuro es eléctrico, pero lo de usar cables para recargar no deja de ser un tanto arcaico. Para solucionarlo. dos gigantes como la alemana Siemens y la americana WiTricity han unido fuerzas. De momento, los teutones han invertido 25 millones de dólares para adquirir una participación minoritaria en WiTricity con un objetivo: impulsar el uso generalizado de la carga inalámbrica en coches eléctricos y activar una revolución que va a cambiar incluso a Tesla.
El objetivo de este movimiento es impulsar la innovación en un mercado emergente y de futuro como es el de la carga inalámbrica de vehículos eléctricos. Según las previsiones de los expertos, estas soluciones van a mover en Europa y Norteamérica hasta 1.900 millones de euros en una fecha tan cercana como 2028. Tesla está pendiente de todo ello.
La carga inalámbrica será el sistema estándar
La intención principal de WiTricity y Siemens es convertir la carga inalámbrica en el nuevo estándar. Si no se logra, consideran ambas multinacionales, la expansión y democratización del coche eléctrico estaría en peligro y la revolución verde no podría completarse tal y como está previsto «Combinar la huella global de Siemens y la cartera de carga de vehículos eléctricos con la tecnología innovadora de WiTricity es el primer paso para elevar nuestra oferta en el espacio de carga inalámbrica», señala Markus Mildner, el director ejecutivo de Siemens eMobility.
Un acuerdo de envergadura
Otro de los aspectos más detacados del acuerdo es que Siemens también se convertirá en socio tecnológico del proyecto de WiTricity para colaborar con los fabricantes de vehículos, especialmente con los de vanguardia, como Tesla, y desarrollar soluciones de carga inalámbrica interoperables.