Una de las características principales que ha tenido el Mercedes a lo largo de su historia es que, independientemente del modelo que sea, la marca alemana siempre se sitúan varios escalones por encima de la inmensa mayoría de los coches del mercado, incluso en muchas ocasiones por encima de sus rivales premium BMW y Audi.

 

Así, Mercedes es sinónimo de calidad, de lujo, de imagen, de tecnología y de estatus, algo que en la marca saben muy bien y es lo que provoca que sus precios no es que estén precisamente al alcance de la inmensa mayoría de conductores en España. Un buen ejemplo en este sentido es el Mercedes GLC, todo un súper ventas en las carreteras europeas desde hace ya algunos años pero que tiene un precio de acceso que se queda en torno a los 60.000 € en la versión normal y en torno a los 65.000 € en la versión coupé, la versión con un toque más deportivo en su estética.

Es el más barato, pero el GLC más sencillo es el más interesante

Lo curioso en este caso es que, dentro de la amplia gama de acabados y de motores que podemos encontrar dentro de este GLC, la versión más sencilla acaba siendo la más interesante en cuanto a relación calidad precio. Una versión sencilla que llega con un motor de más de 200 caballos de potencia que le permite ser rápido y potente cuándo es necesario y a la vez tener un consumo moderado.

Evidentemente a nivel de equipamiento es un modelo muy top, por lo que en este sentido no hay muchas quejas a nivel de tecnología. Sin embargo, no son pocos los que aseguran que, en las versiones más sencillas de todas, algunas calidades algunos materiales no son propias de un modelo de estos precios, aunque eso no significa que no sean calidades buenas para una marca premium.

 

Otro inconveniente que puede resultar molesto para algunos es que en algunas ocasiones el ruido del motor acaba siendo demasiado evidente, algo que, sin que sea un problema exageradamente grande ni molesto, no suele ser habitual en modelos de este tipo de fabricantes.

En cualquier caso, todo parece apuntar que, como ha ocurrido con las anteriores generaciones, el actual GLC va a seguir siendo toda una referencia en España y en Europa entre los SUV premium.