Los tiempos en el sector del automóvil están cambiando a velocidad de vértigo. El escenario en el que nos encontramos y en cuyo horizonte se visualiza el 2035 como fecha límite impuesta por la Unión Europea para dejar de vender coches de combustión no tiene nada que ver con el que vivíamos hace unos años. Un panorama que se está llevando algunos modelos por delante.

A la transición hacia la movilidad eléctrica se suman factores como la escasez de semiconductores y microchips, el aumento del precio de las materias primas o la inflación en el coste de las energías. Una serie de factores que pone a las marcas sobre aviso para que vayan con pies de plomo en los próximos años.

Las berlinas corren peligro de muerte

Esto significa que las marcas se ven obligadas a apostar por los modelos más rentables. En este sentido, los SUV son los modelos que parecen capear mejor el temporada. Aunque los utilitarios tampoco viven malos tiempos.

Otra cosa es lo que ocurre con las berlinas. Estos modelos ideales para toda la familia que triunfaron en tiempos pasados han visto como los todocamino les robaban todo el protagonismo. Y muchas de ellas están condenadas a desaparecer.

Salvo milagro, modelos como el Opel Insignia y el Ford Mondeo no volverán

Buen ejemplo de ello son modelos como el Opel Insignia o el Ford Mondeo. Dos modelos que han sido sentenciados y que, salvo milagro, no volveremos a ver en el mercado. Las respectivas marcas no tienen intenciones de darles continuidad. Está por ver si resucitan en forma de coches eléctricos.

Opel Insignia
Opel Insignia

Otras marcas buscan fórmulas para mantener sus berlinas a la venta. Estrategias que tienen que ver con ofrecer gamas más ajustadas, con menos opciones para los consumidores, o apostando únicamente por las versiones familiares. Es el caso del Volkswagen Passat, que por el momento solo mantendrá a la venta la versión familiar, el Variant.

Porque las nuevas normativas exigen mayores inversiones a los fabricantes. Y la respuesta de estos al nuevo paradigma es centrar sus esfuerzos en los modelos más rentables. Lamentablemente, este no es el caso de las berlinas, que han perdido la partida contra los SUV y los crossover.

Con todo, las berlinas que sobrevivan a esta situación llegarán a los concesionarios con ofertas más reducidas y con modelos en los que la electrificación tenga un alto protagonismo. Es decir, versiones híbridas, híbridas enchufables o completamente eléctricas que, lógicamente, serán bastante más caras de lo que hemos visto hasta ahora.