El Mazda CX-60 no es tan conocido como el Toyota RAV4, pero este SUV japonés ha logrado consolidarse como una opción interesante en el segmento premium. Con un diseño elegante y una propuesta que se aleja de las líneas más tradicionales de los vehículos europeos, el CX-60 se ha posicionado como el buque insignia de la marca nipona. Aunque lleva dos años y medio en el mercado, Mazda ha decidido renovarlo para mantenerlo competitivo hasta la llegada del CX-80 en 2025.
A nivel de diseño exterior, los cambios son sutiles, pero destacan elementos que buscan refinar su apariencia. Se ha incorporado un nuevo color de carrocería llamado Zircon Sand, un beige metalizado que aporta un toque sofisticado y moderno. En cuanto a su interior, se suman dos nuevos acabados de lujo: HOMURA PLUS y TAKUMI PLUS, que elevan la experiencia premium con equipamientos exclusivos, como un techo corredizo panorámico y un sistema de sonido BOSE con 12 altavoces. Estos detalles colocan al CX-60 entre los modelos mejor equipados de su categoría.
Se añaden dos acabados y se mejora la configuración mecánica
El Mazda CX-60 no solo apuesta por el diseño, sino también por la tecnología y la comodidad. Entre las novedades más destacadas, se incluye un portón trasero eléctrico con control por sensor, una cámara de 360º con vista transparente del capó y un sistema de carga inductiva para smartphones. Estas características no solo mejoran la experiencia del usuario, sino que también lo colocan como un competidor serio frente a modelos europeos.
En el apartado técnico, Mazda ha optimizado la suspensión delantera y trasera, introduciendo una configuración de muelles más blandos y con mayor recorrido. Esto mejora el agarre en carretera y aumenta la estabilidad, especialmente en curvas. Además, la dirección asistida ha sido reajustada para ofrecer un manejo más preciso, mientras que el sistema de tracción total i-Activ AWD también ha recibido mejoras en su software de control.
El renovado Mazda CX-60 llega al mercado español en febrero de 2025
En términos de motorización, el CX-60 mantiene su amplia gama de opciones. Destaca el híbrido enchufable (PHEV) que combina potencia y eficiencia, con 327 CV y una autonomía eléctrica de hasta 64 kilómetros. También están disponibles dos versiones diésel, ambas con un bloque de seis cilindros en línea y 3.3 litros. Estas variantes ofrecen 200 CV y 254 CV, respectivamente, ambas con tracción a las cuatro ruedas y cambio automático de ocho velocidades.
Si bien aún no se han anunciado los precios para esta versión renovada, Mazda ha confirmado que estará disponible en los concesionarios a partir de febrero de 2025. Esto le permitirá competir directamente con otros SUV de su segmento y consolidar su posición en el mercado.