Solo hace falta ver las cifras de ventas que está logrando MG en los últimos tiempos en nuestro país para darse cuenta de que la antigua marca británica que ahora formo parte del gigante asiático Saic Motors se ha convertido en uno de los principales actores en nuestro país.

Es más, con más de 15.000 matriculaciones sumando las ventas de los siete primeros meses de este 2024, la marca china ocupa ni más ni menos que la 15ª posición, una posición que mejora la de fabricantes tan asentados y tan veteranos en nuestro mercado como es el caso de Opel, Ford, Volvo o Fiat, entre muchos otros.

 

El principal argumento de venta de este fabricante es que sitúa sus modelos varios escalones por debajo en cuanto a precio respecto a sus rivales directos, un precio menor que en muchos casos no significa que tenga una calidad mucho peor, sino que más bien es fruto de los beneficios de una marca china que fabrica sus coches lejos de las carreteras europeas.

Omoda apunta a ser incluso más determinante que MG

En este sentido, si bien es cierto que siguen siendo muchos los conductores que por diferentes motivos no quieren saber nada de un coche de origen chino, la entrada en juego de otros fabricantes y sus buenas cifras de ventas evidencia también que en nuestro país muchos han dejado de lado algunas de sus razones y sí que están apostando por modelos de estas características.

 

Un buen ejemplo de ello es Omoda, una marca que en apenas cinco meses en nuestro país y con tan solo un modelo a la venta ya logra superar los registros de marcas como KGM (la antigua SsangYong), DS, Porsche o Honda, entre muchas otras.

Su apuesta es la misma que en el caso de MG, aunque cabe tener en cuenta que, tal y como podemos ver en las imágenes del Omoda 5, en este caso se trata de un modelo que brilla por su diseño y por su tecnología, además de ser una opción realmente más barata que la inmensa mayoría de sus rivales directos.

El buen recibimiento a nivel comercial que ha tenido este modelo no hace otra cosa que provocar que sean muchos los que se pregunten si dentro de no mucho tiempo este fabricante, sobre todo cuando empiece a ampliar su catálogo, acabará convirtiéndose en un rival muy duro para MG, así como para el resto de marcas clásicas en Europa.