No hay solución: las berlinas desaparecen una tras otra y las marcas anuncian que no habrá nuevas versiones de unos coches que, hasta hace nada, eran el vehículo al que aspirábamos todos. Opel ya lo ha dejado claro: su excelente Opel Insignia dirá a adiós cuando finalice la vida comercial de la generación actualmente a la venta. En 2023, dejarán de fabricarlo pero, mientras, es una alternativa perfecta para quienes todavía no han sucumbido a la fiebre SUV.

¿Cómo es el Opel Insignia?

El Opel Insignia es una berlina de 4,89 metros de largo con 490 litros de maletero que se ofrece con dos opciones de motorización: un solvente y eficaz diesel 2.0 de 174 CV y un poderoso 2.0 SIDI de gasolina con 200 CV y caja automática. El coche se presenta con carrocería de 5 puertas, en versión familiar y, para quien lo quiera así, en una edición especial denominada Country Tourer que resulta especialmente adecuada para los amigos de los vehículos con aspecto campero.

Bajos consumos

Los consumos que presenta el Opel Insignia son bajos u su estética los diferencia de las berlinas clásicas, porque tiene un toque deportivo que lo singulariza. El equipamiento es muy amplio en todas las versiones e incluye faros LED, control de crucero, llantas de aleación y todo lo que se le exige a un coche que, siendo honestos, merecería seguir en el mercado unos cuantos años más.