Otra víctima más del cambio de gustos que, a favor de los SUV y los crossover, ha experimentado el mercado en los últimos años: el Opel Insignia, la berlina estrella de la marca alemana de Stellantis, dejará de fabricarse este mismo año. Un desastre, sin duda, para todos los que consideran que hay vida más allá de los todocaminos.

Opel Insignia
Opel Insignia

Adelanto en los planes de Stellantis

En origen, Stellantis tenía previsto dejar de fabricar el Opel Insignia en 2024, pero finalmente ha cambiado de planes. El motivo de tal decisión está estrechamente relacionado con un nuevo vehículo exclusivamente eléctrico que la marca tiene ya preparado para sustituir al emblemático sedán. Este nuevo coche va a necesitar una línea de montaje exclusiva y la marca de Russelheim no quiere restar espacio a las cadenas de montaje en las que se ensamblan ahora vehículos como el DS 4, el Opel Astra o el Astra Sports Tourer, basados todos en la plataforma EMP2, que admite diferentes formas de electrificación. La plataforma del Opel Insignia, denominada Epsilon II es antigua y la inversión necesaria no ya para electrificarla totalmente si no, simplemente, para permitir una versión PHEV del coche es inasumible.

¿Con qué reemplazará Opel al actual Insignia?

Para saberlo, basta con echar un vistazo a la cartera de modelos de las otras marcas del grupo Stellantis. En Citroën han cubierto el nicho de las berlinas con un elegante crossover, el C5 X, un coche del que el nuevo Insignia utilizará la tecnología. La plataforma elegida para el nuevo vehículo será la STLA Medium, que permitirá un sistema escalable para todo tipo de modelos y carrocerías. Y, sí: el nuevo Opel Insignia será un crossover también.