Con poco menos de 8000 matriculaciones sumando las ventas de los dos primeros meses de 2025, es evidente que Peugeot no ha arrancado este año de la mejor manera posible. Y es que cabe tener en cuenta que, si bien es cierto que el fabricante francés a ver que aún queda mucho por delante y que se le puede dar la vuelta a la situación, ocupar ahora la octava posición no hace otra cosa que evidenciar este mal momento de forma en cuanto a ventas por el que pasa la marca.
Son varios los motivos que explican que una parca tan asentada en nuestro país como pero yo vea como algunos fabricantes están situados por delante, pero seguramente uno de los principales motivos es que el modelo más barato de la marca no puede competir en cuanto a precio con los modelos más baratos de su categoría, que a la vez se están convirtiendo en los modelos más vendidos en España.
El Peugeot 208 es barato, pero tiene rivales más baratos por delante
Y es que tan solo hace falta ver cuáles han sido los 10 coches más vendidos en el pasado mes de febrero en nuestro país para darse cuenta de que la inmensa mayoría de ellos son los modelos más baratos de sus respectivos fabricantes, incluso algunos de ellos son modelos low-cost.
En el caso de la marca francesa, no ha sido otro que su 208 el que ha acabado en la octava posición, unos buenos resultados que han provocado que este utilitario aumente su cuota de mercado y se ubique ahora en la 11ª posición a nivel general en lo que llevamos de año.
Eso sí, cabe tener en cuenta que, de los siete modelos han mejorado sus registros en este pasado mes de febrero, los cuatro primeros pueden presumir de ser rivales directos por precio: el MG ZS, el Dacia Sandero, el Renault Clio y el Seat Ibiza. Además, destacar también el buen rendimiento comercial del Opel Corsa, que ha acabado en 10ª posición y que pasa por ser también la propuesta más barata de la marca alemana en nuestro país.
Un Top 10 en nuestro país que refleja una tendencia al alza, que no es otra que la de ir cada vez más a por coches pequeños y baratos, algo que evidentemente no encaja con las necesidades y las expectativas de muchos fabricantes.