No es que sea precisamente ningún secreto que la inmensa mayoría de fabricantes en nuestro país están centrados en renovar su gama de modelos apostando por ir eliminando cada vez más modelos con motores de combustión tradicionales y poniendo la venta modelos con motores cada vez más electrificados, ya sean micro híbridos, híbridos auto recargables o directamente 100 × 100 eléctricos.
Esa apuesta ha dado muy buenos resultados a algunos fabricantes, pero hay otros que están empezando a notaría que está puesta no ha sido la más acertada, sobre todo porque la desaparición de las mecánicas convencionales ha llegado también de la mano de la desaparición de algunos modelos que tenían buenas cifras de ventas pero que no entraban en los planes de los fabricantes.
Un buen ejemplo de ello es Renault, un fabricante que decidió desprenderse hace apenas unos meses de un compacto que había sido un icono de los 90 y que seguía siendo una opción realmente interesante: el Megane.
El Renault Megane sigue muy vivo en los países del este de Europa
La marca francesa consideraban que la salida de este modelo y la llegada del Symbioz, un crossover compacto con motor híbrido auto recargable, sería un movimiento acertado en algunos países de Europa, pero de momento las cifras de ventas de este nuevo modelo no están siendo las esperadas.
No es casualidad entonces que en algunos países del este de Europa como es el caso de la República Checa o de Polonia la marca así que siga apostando por un Megane, aunque en este caso se trata de la versión Grand Coupé, una versión más estilizada y deportiva y que además añade capacidad de carga en su maletero.
Es cierto que este tipo de carrocerías apenas tienen presencia ya ni en España ni en la inmensa mayoría de mercados importantes a nivel europeo, pero que la marca siga apostando por ellas en algunos países del este de Europa es una evidencia de que, especialmente ahora que las marcas chinas están empezando a apostar por productos con muy buena relación calidad precio, algunas decisiones no son siempre las más acertadas.
Evidentemente Renault no tiene ningún tipo de intención de recuperar modelo de estas características para las carreteras españolas, pero no sería extraño que, sobre todo si las cifras de ventas en algunos de sus modelos no son las esperadas, hubiera algún tipo de cambio de plan por parte de la marca francesa.