Tan solo hace falta ver las cifras de ventas que ha logrado MG en nuestro país para darse cuenta de que la llegada a las carreteras españolas hace ya unos cuantos años de este fabricante chino ha provocado una pequeña revolución.
Y es que, con permiso del Dacia Sandero, el coche más vendido en España en el pasado 2024 y también el coche más vendido en Europa el pasado 2024, el MG ZS puede presumir de ser una de las compras más habituales en nuestro país desde hace ya un tiempo, entre otras cosas porque es uno de los SUV low cost de referencia.
El principal motivo del éxito de este modelo es que, como ocurre con la inmensa mayoría de coches chinos, se fabrica en China y, por lo tanto, puede presumir de tener un coste de fabricación mucho más bajo y, más allá de que Europa en los últimos meses allá apostado por algunos aranceles muy agresivos, acaba teniendo un precio mucho más competitivo que el que tienen algunas marcas que fabrican mucho más cerca de nuestro país.
El Dacia Sandero evidencia que no es necesario fabricar en China para tener un precio bajo
Es más, llama a especialmente la atención que el modelo que puede presumir de ser el actual rey de ventas tanto en España como en Europa, el Dacia Sandero, no se fabrica precisamente en China, sino que divide su fabricación en tres fábricas, una de ellas en Rumanía, y dos de ellas en Marruecos.
El hecho de que este modelo siempre se había caracterizado por ser una opción muy sencilla no hace otra cosa que permitir que Dacia, que sabe muy bien que la fabricación en Marruecos es más barata que en Europa pero que a la vez todo lo que implica el transporte acaba siendo también mucho más barato que traerlo desde China, acabe convirtiendo este modelo en una de las opciones más baratas, con un precio de partida en su versión de acceso que se queda justo por debajo de los 14.000 €.
Por otro lado, cabe destacar que la marca ha dado un paso evidente adelante en los últimos años en lo que se refiere a la tecnología y a la calidad de sus modelos, siendo opciones que ya no son tan extremadamente sencillas como lo eran las primeras generaciones que se pusieron a la venta en nuestro país, de ahí que cada vez sean más conductores los que lo vean, por necesidad o por gusto, una opción acertada sin necesidad de recurrir a coches que se fabrican en China.