Por mucho que Toyota se haya distinguido en los últimos años por ser un fabricante que ha encontrado en sus motores híbridos auto recargables, un tipo de mecánicas que busca ante todo un bajo nivel de consumo y una muy buena eficiencia, su mejor argumento de venta, cabe destacar que la marca japonesa no ha dejado de lado ese espíritu de marca de coches deportivos muy interesantes.

De hecho, no es que sea precisamente ningún secreto que el máximo responsable de Toyota es un gran amante de los coches deportivos y ha sido el impulsor de que, por mucho que modelos con motores auto recargables se hayan convertido en la mejor arma de la marca, siempre haya habido un modelo con un motor de combustión potente y divertido en el catálogo del fabricante.

 

Eso sí, en la marca japonesa saber también muy bien que la era de los motores de combustión tradicionales está muy cerca de llegar a su fin, de ahí que ya estoy trabajando intensamente en la llegada de modelos 100 × 100 eléctricos. Modelos que, a diferencia de lo que ocurre con la inmensa mayoría de los actuales, contarán con mejores mecánicas y mejores baterías, por lo que los Toyota eléctricos es muy probable que se conviertan también, como ocurre actualmente con sus híbridos, en los modelos de referencia a nivel mundial.

Toyota tendrá eléctricos con cambio manual

Pero lo curioso en este sentido es que, más allá de estar trabajando y desarrollando algunos de sus eléctricos de cara a los próximos años, en Toyota ya han asegurado y confirmado que es lo que parecía una locura hace apenas unos años se convertirá en una realidad en algunos de sus eléctricos.

Y es que fue en 2017, cuando los eléctricos apenas tenían presencia pero ya empezaban a ser modelos con un futuro interesante, cuando se encima de la mesa en algunos despachos de Toyota el hecho de crear un eléctrico con un cambio de marchas como el que tiene un motor de combustión.

 

Una idea que ya se ha hecho realidad, con un sistema que simula la forma en la que una transmisión manual entrega la potencia y par a través de una palanca de cambios y de un pedal de embrague. Se trata de un sistema conectado a un software que modula artificialmente la cantidad de par que el motor eléctrico envía a las ruedas y que, además, cuenta incluso con freno motor y sonido simulado.

No se sabe aún qué modelos en concreto tanto de Toyota como de Lexus montarán este sistema, pero lo cierto es que la marca japonesa ha vuelto demostrar que ideas en un principio poco factibles acaban siendo una realidad.