Toyota ha anunciado una llamada a revisión masiva en Estados Unidos para sustituir más de 100.000 motores de vehículos Toyota y Lexus ante el riesgo de sufrir fallos graves en el motor. La noticia ha causado impacto entre los propietarios y en la industria automotriz, ya que la marca japonesa ha construido su reputación precisamente sobre la fiabilidad y durabilidad de sus vehículos. Sin embargo, incluso las marcas más confiables enfrentan retos como este, y Toyota ha decidido tomar medidas drásticas para proteger su imagen y la seguridad de sus clientes.

El problema se ha identificado en ciertos motores V6 de 3.4 litros V35A fabricados en dos plantas, una en Japón y otra en Alabama, que presentan un defecto en el proceso de producción. Este defecto provoca la acumulación de residuos metálicos en el interior del motor, que con el tiempo pueden contaminar el aceite y circular por todo el sistema, generando un desgaste acelerado que podría causar el fallo completo del motor. En el peor de los casos, el motor podría perder potencia en plena marcha o incluso no volver a arrancar.

Toyota Tundra

Toyota sustituirá más de 100.000 motores en Estados Unidos

Este riesgo potencial de fallos catastróficos ha llevado a Toyota a optar por una solución poco común: en lugar de intentar reparar los motores afectados, ha decidido sustituir completamente los motores en 102,296 vehículos. Este plan de sustitución cubre los modelos Toyota Tundra de los años 2022 y 2023, así como el Lexus LX. Aunque esta acción supone un elevado coste logístico y financiero para Toyota, refleja el compromiso de la marca con la seguridad y la satisfacción del cliente.

La sustitución de cada motor requiere entre 13 y 21 horas de trabajo y representa un coste estimado de entre 2,700 y 4,600 euros por vehículo. En total, Toyota estima que el proceso podría costar entre 300 y 500 millones de dólares, una inversión significativa que muestra la importancia de su reputación. Para asegurar que el reemplazo sea lo más eficiente posible, Toyota ha diseñado un sistema de logística detallado, coordinando con sus talleres en todo Estados Unidos para que puedan llevar a cabo las sustituciones sin afectar otras operaciones de mantenimiento.

Lexus LX

El Toyota Tundra y el Lexus LX son los afectados

Toyota también ha hecho esfuerzos para simplificar el proceso para sus técnicos, proporcionando herramientas especializadas que permiten reemplazar el motor sin desmontar el capó o la parrilla del vehículo, lo cual ahorra tiempo y recursos. Además, los motores retirados serán devueltos a Toyota, donde serán revisados y posiblemente reciclados o reutilizados en el entrenamiento de nuevos técnicos.

Uno de los retos adicionales de esta revisión será proporcionar vehículos de sustitución para los clientes afectados, especialmente para aquellos que usan su Toyota Tundra para actividades laborales. Toyota se ha comprometido a garantizar que estos clientes no se vean afectados en sus tareas diarias durante el proceso de reparación.