Volvo y Seat no es que puedan presumir de ser precisamente dos rivales directos, entre otras cosas porque la marca sueca pasa por ser una de las marcas premium mejor valoradas en nuestro país, en el caso de Seat, se trata de un fabricante generalista que no tiene ningún tipo de intención de convertirse en una marca premium.

No es casualidad entonces que el perfil de cliente que busca un SUV de tamaño compacto sea diferente en el caso de Seat y en el caso de Volvo, con el objetivo de tener un modelo bien dotado en todos los sentidos a un precio más bajo de la casa de la marca española y, por el contrario, un modelo premium en el que el precio no es un problema en el caso de la marca sueca.

 

Así, modelos como el XC40 o el Ateca comparten segmento y por lo tanto podrían tener el mismo púbico objetivo en cuanto a tipo de coche, pero saben muy bien en las dos marcas que los conductores que van a por un XC40 seguramente no quieren saber nada de un Ateca, y al revés.

El Volvo es una opción mucho mejor en todos los sentidos

Teniendo en cuenta que la diferencia de precio entre las dos versiones de acceso de estos dos modelos es de unos 10.000 euros y que el Ateca roza los 30.000 euros mientras que el Volvo roza los 40.000 euros, no son pocos los que se preguntan si realmente vale la pena ir a por el premium.

 

La respuesta es más que obvia: sí. Y es que, más allá de que el modelo sueco tiene un estatus en el mercado muy superior y además tiene un valor futuro en el mercado de segunda mano también superior al del modelo español, es mucho mejor en todos los sentidos, tanto a nivel mecánico como a nivel de equipamiento como a nivel de tecnología y calidad de materiales.

Eso sí, cabe tener en cuenta que 10.000 € de diferencia no es poco dinero, de ahí que sean muchos los que, a no ser que si o si buscan un modelo premium por el motivo que sea, ver en el móvil quizás mucho más racional. En cualquier caso, cabe tener en cuenta que incluso si optamos por un Ateca que se equipare en cuanto a precio al Volvo más sencillo, el modelo sueco sigue estando varios escalones por delante, por lo que tan solo vale la pena pensar en un ahorro sustancial de dinero si optamos por ir a por las versiones más sencillas del Seat.