Como bien saben el Renault así como saben también muy bien en el resto de fabricantes potentes a nivel europeo, el segmento de los B-SUV se ha convertido en uno de los más importantes en las carreteras del viejo continente y era uno de los que la batalla está siendo cada vez más reñida.
La oferta de modelos de esta categoría es cada vez mayor y, por lo tanto, los fabricantes sabe muy bien qué hacer ofrecer un producto que se diferencia del resto para aportar ese grado de novedad que ayude a aumentar de forma considerable sus cifras de ventas.
Un buen ejemplo en este caso es un modelo que se ha convertido en uno de los grandes rivales tanto del Renault Captur como de tantos otros nombres muy asentados en este segmento como es el caso del Peugeot 2008, el Toyota Yaris Cross o el Seat Arona: el Jeep Avenger.
El Jeep Avenger es un modelo interesante en todos los sentidos
Y es que en este caso estamos ante un modelo muy interesante no tan solo en lo que se refiere a su diseño, sino a que, aunque aún no se ha puesto a la venta la versión más aventurera de todas, es uno de los SUV puede presumir de tener mejores prestaciones de todoterreno, sin ser evidentemente un modelo pensado para llevar a cabo una conducción muy extrema.
Uno de los grandes aciertos de la marca americana con este modelo ha sido la introducción de mecánicas micro híbridas, mecánicas que en este caso llegan asociadas a un motor de 100 caballos de potencia unido a una transmisión automática que lo convierte en una opción muy cómoda, con una potencia suficiente para moverse más que bien en cualquier situación y, además, con los beneficios de poder lucir la etiqueta ECO de la DGT.
Este motor configurado junto al nivel de acabado Longitude es el protagonista de una de las mejores exclamaciones por parte de la marca americana, que lo acaba ofreciendo por un precio de partida que se queda en torno a los 25.000 € contando con todas las promociones y descuentos disponibles.
No es casualidad entonces que en menos de dos años este modelo ya roce las 100.000 matriculaciones en Europa y se haya convertido en uno de los modelos de moda en el viejo continente, poniendo en apuros o al menos poniendo en alerta a modelos tan asentados como el Renault Captur.