1- Otegi y el marketing
Reconozcámoslo, la campaña publicitaria fue muy buena. Unos cuantos días antes de emitirla, todo el mundo ya sabía que Jordi Évole había entrevistado a Arnaldo Otegi en La Sexta.
Y reconozcamos también que entrevistar al líder de la izquierda independentista vasca en una cadena estatal tiene un cierto punto de valentía. Y reconozcamos que la decisión implicaba un riesgo. Y digamos también que no ha sido agradable para el periodista haber tenido que soportar una campaña en que ha habido desde insultos a amenazas de muerte, pasando por todo tipo de menosprecios y acusaciones injustas.
Ahora bien, el 4 de marzo (tres días después de salir de la prisión) Otegi también fue entrevistado en una TV. En Euskal Telebista. Es cierto que durante menos tiempo y con menos clímax, pero sobre todo con menos publicidad y menos resonancia.
Si se mira el vídeo, comprobará cómo, por ejemplo, en el minuto 8.12 habla de las víctimas y dice lo mismo que 44 días después le dijo a Évole y que tantos titulares generó. Y si se mira el resto, verá que lo hace de manera más atropellada (por culpa del poco tiempo de lo que se disponía) y sin editar (la entrevista fue en riguroso directo), pero lo que expresa es más o menos lo mismo:
La gran diferencia es que, de la entrevista de ETB no se enteró nadie. Lo que pasa en un medio de Bilbao, BCN, A Coruña o Sevilla no es noticia en "España", no existe fuera de su ámbito. ¿A través de los medios “estatales”, sabemos lo que pasa en el día a día del País Vasco o de Andalucía? No, en los medios "estatales" todo es Madrit (concepto). La España radial también existe mediáticamente. Pero es que cualquier cosa dicha en una cadena estatal sobre Catalunya tiene más retorno en BCN que si lo expresas en un medio de aquí.
Y si de lo que se trata es de hacer autocrítica, sólo recordar que los medios catalanes estuvimos una semana hablando de la entrevista de Otegi en Salvados y cero segundos de la entrevista de Otegi en ETB.
2- Rajoy-Puigdemont, un encuentro de gestos
Todo el mundo sabía que la reunión entre el presidente catalán y el presidente español en funciones no tendría ningún resultado. Pero todo el mundo sabía también que el encuentro interesaba a los dos y que por otra parte, y ya puestos, mejor verse que ignorarse.
Puigdemont quiere desmarcarse de la sombra de Mas. Y para marcar perfil propio ha optado por mostrarse como una persona firme en las convicciones, pero dialogante. Y Rajoy tiene un ataque de simpatía preelectoral repentina y ha decidido salir de su despacho y hablar con seres vivos.
A falta de resultados, el interés de la reunión consistía en estudiar el ballet que acompaña este tipo de acontecimientos. El recibimiento, la manera de mirarse, los movimientos de las manos, las posturas... en definitiva, los gestos.
Y quien se ha convertido en una referencia en este tipo de análisis es Patrycia Centeno. Cualquier acontecimiento político que ofrece una imagen, pasa por su cedazo analítico. Esta vez también:
Pero si quiere tener más detalles y con más profundidad, no se puede perder la pieza que hizo.
Porque la política, sobre todo, son gestos y actitudes. Porque la política la hacen personas y eso, por una parte o por la otra, para bien o para mal, se acaba notando. Siempre. Y la química, o su ausencia, puede determinar acuerdos o desacuerdos que nos afectan a todos (y a todas).
3- El lenguaje corporal no engaña
Y hablando (y sobre todo mirando) de lo que expresa el lenguaje corporal, SEN-SA-CI-O-NAL vídeo el que consiguieron los compañeros de BTV (la televisión municipal de BCN).
En la noticia está todo explicado, pero le sitúo un poquito el tema. Por una parte Daniel Mòdol, concejal del PSC, manifestándose totalmente a favor de tirar abajo Can Vies (recuerde, es aquel edificio okupado que el ayuntamiento Trias quería demoler en cumplimiento de la ley y de los planes urbanísticos y que una serie de incidentes violentos lo hicieron rectificar). De la otra Janet Sanz, teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad, defendiendo el diálogo para mantener el edificio en pie. Observe la reacción de Mòdol al escucharla (es en el minuto 00.53). ¡IN-SU-PE-RA-BLE!
4- Pablo Iglesias y los periodistas
El líder de Podemos fue a la universidad para presentar un libro. Y la cosa acabó como el rosario de la aurora entre él y la prensa. Sobre todo cierta prensa de Madrit (concepto). Una parte de la prensa porque Iglesias es su gran bestia negra y la otra porque, como el periodista protagonista es de los suyos (de momento, porque se prepara un ERE histórico), había que aprovechar el momento.
Vivimos una precampaña política y una precampaña permanente de los medios y cualquier cosa da sabor al caldo. Para el caldo de los unos y para el de los otros. Si le parece, yo le paso las piezas del rompecabezas, Usted se lo mira todo y saca sus propias conclusiones.
De entrada, aquí está lo que dijo exactamente Pablo Iglesias:
Y a la hora de la opinión, tenemos un artículo que es un término medio, otro que es un análisis bastante completo y un artículo muy en contra de Iglesias publicado por el medio que se ha sentido agredido (verbalmente). Usted se lo mira todo con calma y saca las conclusiones que crea oportunas,
Y no, no es que me esté escapando de dar mi opinión sobre el caso. Lo qué pasa es que creo que los periodistas hablamos demasiado a menudo de la profesión y de nuestros conflictos internos, que la mayoría de veces son de un gremialismo patético. Y creo que es bueno, aunque sea de vez en cuando, ofrecer todas los elementos de información a nuestros clientes y que ustedes se formen su propia opinión sin nuestra intervención. Porque, normalmente, nuestra participación, o bien está manchada de gremialismo, o bien de prejuicios políticos, o bien de prejuicios mediáticos o bien de prejuicios en general. Y usted es lo bastante listo (o lista) para tener una opinión propia sin que haga falta que le adoctrinen.
5- Prince y el efecto tienda histórica que cierra
Cuando cierra una tienda de discos o una librería histórica, la red se llena de gente lamentando la noticia. Y yo siempre pregunto: usted que ahora llora tanto, ¿cuánto hacía que no iba a comprar? Y, como usted, todos los que parece que sin la tienda, hayan perdido a un familiar. Si algunos establecimientos cierran es porque la gente no va. Y si no va, deja de ser negocio. Y si una cosa no es negocio, adiós. Es ley de vida. Como antes cerraron las empresas de diligencias, las tiendas de sombreros y los traperos.
Con Prince he tenido una sensación parecida. Todos los medios diciendo ahora que era un genio y que era un referente. Perfecto, sin embargo, ¿cuánto hace que usted no había leído una noticia sobre Prince? ¿Cuánto hace que no había visto un vídeo suyo en alguna cadena? ¿Cuánto hace que una emisora de radio no había emitido una pieza suya?
El alud de fiebre laudatoria postmortem, a la que estamos tan acostumbrados últimamente, hace que mucha gente no se atreva a reconocer que no tenía ni idea de quién era Prince. Pero la culpa no es suya (de la gente) sino de los medios que ahora nos presentan al músico como una eminencia y que en vida no le dedicaron ni un segundo.
Otro tema es el de los detalles de su muerte. Cuando se nos haya pasado la fiebre del “tú fuiste el mejor” mojaremos pan con las causas. Y cuanto más morbo mejor. Eso sí, sobre todo que no se nos note. ¿Qué tal poner unos interrogantes? Buena manera de afirmar sin decir nada. Y si puede ser añadiendo un buen adjetivo, todavía mejor, que eso hace que la gente entre a la noticia y el contador vaya haciendo clics...
6- Cuando la inteligencia vence la censura
Algunas redes sociales como Facebook censuran imágenes que consideran "inapropiadas". El problema está en donde sitúan la línea roja. No es lo mismo porno duro que la imagen de una mujer dando de mamar. De la misma manera que no es lo mismo el vídeo de una orgía en un convento de clausura que el vídeo de una mujer autoexplorándose los pechos para detectar un posible cáncer de mama.
El MACMA (Movimiento de Ayuda al Cáncer de Mama en la Argentina), decidió desafiar esta censura tan infantil como absurda con ingenio. Si los pechos de las mujeres están prohibidos, incluso cuando se trata de medicina preventiva que puede salvar vidas, hagámoslo con un hombre. Y este fue el resultado:
Ahora yo podría estar horas aplaudiendo, pero será más útil que dedique mi tiempo a publicar el máximo de veces posible este vídeo. Porque es inteligente y, sobre todo, porque puede salvar vidas. A pesar de la censura del integrismo descerebrado.
7- Marchándose una de machismo paternalista
José Joaquín Brotons es un periodista deportivo de toda la vida que actualmente trabaja en Eurosport. La respuesta de una usuària a un tuit suyo sobre Luís Enrique generó un momento patético:
Como la barbaridad se comenta sola, no hay que perder más tiempo. Símplemente el suficiente para darnos cuenta de la mentalidad que pasean todavía algunos y sin manías...
8- Cuando la casualidad nos regala momentos memorables
BRUTAL!!! Noticia de El País sobre el ministro Soria. Y la publicidad que aparece de forma casual y aleatoria en la parte superior es de... de... ¡¡¡sí, sí de empresas offshore e indemnizaciones por despido!!! Ah, el azar... ¿Bien, porque fue azar, verdad?
9- Los famosos más famosos
Ha vuelto Supervivientes, el concurso televisivo aquel en que un grupo de famosos muy famosos se van a una isla para adelgazar a base de pasar hambre. Lo que no entiendo es como gente tan famosa y con una actividad tan importante para la sociedad, renuncia a su apasionante día a día y accede a ir. La lista es espectacular...
¿La sociedad mundial podrá seguir funcionando con toda esta gente almacenada en una isla? Lo dudo.
Bien, y otro gran tema son los sueldos que cobran para participar en la cosa. ¡Una vergüenza! Que gente de un nivel como este reciba la miseria especificada aquí debajo es un escándalo tan grande que la Defensora del Pueblo debería intervenir. Bien, si todavía existe, porque no se habla nunca de ella (de la Defensora del Pueblo, no de Supervivientes). No hay derecho a estos recortes. ¡¡¡Eso sí que es destrozar el Estado del Bienestar!!!
10- El hazmerreír del planeta
Cristiano Ronaldo es un pobre chico que necesita llamar la atención. Y su gran problema es que lo hace de manera tal que és imposible tomárselo seriamente. Este es el penúltimo ejemplo: