Hace 24 horas que el unionismo más radicalmente combativo en la red denuncia una campaña contra el candidato del PP al ayuntamiento de BCN. Concretamente alertan de un boicot al negocio de venta de pan del señor Josep Bou. Ya sabe, aquel candidato que la mayoría hemos conocido a través de las parodias.
Pero, ¿de qué boicot estamos hablando? ¿Quién lo promueve? ¿Cuánta gente participa? Todo empezó con una denuncia en twitter de Alejandro Fernández, líder del PP de Catalunya:
Como puede ver en la captura realizada este lunes a las 18.00, el efecto del tuit es relativo. En 26 horas son 48 comentarios, 327 retuiteos y 575 likes. Vaya, poquita cosa. Pero la cosa empezó a crecer cuando varios medios unionistas radicales convirtieron el tuit en noticia:
Como ve, el origen de la gran noticia siempre es Fernàndez. Y a falta de cualquier otra fuente, en todos los casos se citan dos únicos tuits. Siempre los mismos. O sea, si hacemos caso de lo que publican varios medios de comunicación, hay un boicot independentista contra un señor unionista, pero la carga de la prueba es más bien reducidamente escasa.
Las últimas horas, sin ninguna otra actividad mejor para pasar el rato, me he dedicado a buscar en twitter cuántos tuits existían pidiendo el boicot a la empresa del señor Bou. Y he encontrado estos dos ya citados, efectivamente. ¿Y sabe cuántos más he encontrado? Otro. O sea, si le parece, procedamos a sumarlos todos.
Tenemos, por una parte, los dos del tuit de Alejandro Fernàndez, que son los mismas que los publicadas por varios medios. Y por la otra tenemos... un tuit. Por tanto el resultado total es de... ¡TRES! Tres tuits pidiendo un boicot.
Y ahora la pregunta sería: ¿tres tuits son un boicot? O, mejor dicho: ¿a partir de cuántos tuits pidiendo un boicot podemos decir que estamos ante un boicot?
En Catalunya hay entre dos millones y medio y tres millones de indepes. Si tres cuentas de twitter (TRES), que pueden estar gestionados por indepes o no, piden un boicot contra alguien, ¿usted cree que es una cifra lo suficientemente significativa como para afirmar que estamos ante un boicot?
¿Que tres cuentas de twitter (TRES), que pueden estar gestionados por Villarejo, como por decir un apellido al azar, pidan un boicot, permite concluir a un periodista que quien promueve el boicot son miembros de un CDR?
Y una última pregunta: ¿El boicot que tanto nos indigna cuando lo hacen a los "nuestros" está totalmente justificado cuando lo pides para los otros, verdad? ¿Y si a los "otros" los insultas llamándoles asesinos y genocidas, todavía te quedas más a gusto, verdad, desde el punto de vista boicotal?
Pues este es el triste panorama el día que resulta ser el que hay más demanda de paz y amor.
Feliz Navidad a todo el mundo. Incluso a los que no creen en la Navidad y a los que inventan boicots.