A ver, ¿definitivamente ya le ha quedado del todo claro, o todavía no? ¿No? Pero... ¿qué me está diciendo? Pues oiga, ahora sí que ya es culpa suya de usted, eh. Porque no será que no le hayan enseñado el camino correcto de todas las maneras posibles. Va, repítalo conmigo: "Aquí, quién se puede manifestar, protestar, ocupar el espacio público, cortar calles y lo que haga falta siempre son los otros. Nunca los unos". ¿Qué, por fin le ha quedado claro el concepto? Pues ahora lo repite mil veces. Y cuando acabe, mil más. Por si todavía le quedara alguna duda sobre el funcionamiento del mecanismo.
¿Que usted es un poquito nazi y le apetece pasearse con otros amigos como usted por el barrio de Madrid que es el icono del colectivo LGTBI (porque ya lo sabe, aquí todos formamos parte de un colectivo u otro)? ¡Pues adelante, que en Chueca falta gente! ¿Convoca la mani en contra de la agenda 2030, un proyecto coordinado por Naciones Unidas para erradicar la pobreza y favorecer un desarrollo igualitario y sostenible? Bien, estar en contra de los pobres y que dejen de serlo es hacerles un favor. Sí, porque los pobres, como no tienen nada, no tiene que sufrir por perder alguna cosa. En cambio los ricos, si dejan de serlo aunque sea un poquito, sufren una pena tan terrible, ¡pobrecitos! ¿Que en la mani se llaman consignas como "fuera maricones de nuestros barrios", "fuera sidosos de Madrid" y "tú no eres español porque no eres blanco"? A ver, con todo eso de la pandemia, la gente ha sufrido mucho y tiene que desahogarse de alguna manera u otra. ¿Que entre grito y grito se hacen saludos nazis? Bien, a ver una cosa, no lo hacen con malicia. Total, que por estas bobadas no pasa nada y usted y sus colegas podrán hacer el recorrido previsto y escoltados por miembros del Cuerpo Nacional de Policía, no fuera caso que se perdieran. O que se encontraran de cara un pobre o un maricón y entonces tuvieran un disgusto y hubiera que denunciar-los. ¡A ellos, por supuesto!
Que usted quiere hacer un botellón, cosa que está prohibida por la ley? Pues convoca uno. En el campus universitario de Bellaterra mismo. Y allí, acompañado de seis mil personas más, roba en los pisos de la residencia de los estudiantes, destroza los trenes con los que se desplaza, provoca problemas de orden público, realiza delitos incluidos en el código penal, se está el rato que quiera y cuando se cansa, lo deja todo hecho una mierda y adelante. Pero, sobre todo, no sufra que no intervendrá nadie. ¡Ah, y si Bellaterra le pilla lejos y le va mejor ir de fiesta a Tiana y acabar haciéndo huir a hostias a la policía que ha hecho venir avisándolos de un falso apuñalamiento, tal como se ve en este vídeo vía Anna Punsí, ¡pues no se prive en absoluto!
Y, si por casualidad, ninguna de estas cosas le apreteciera y prefiriera incitar a la violencia contra el President de la Generalitat sin que pasé nada, ¿por qué no tendría que poder hacerlo, verdad?
Sobre todo, y por encima de todo, si usted es de los otros, haga lo que le salga del escroto y no se reprima, a ver si al final tendrá un trauma. Ahora bien, si es de los unos, de los que usted ya sabe, ni se le ocurra abrir la boca. Los que son de los unos no tienen derecho ni a manifestarse ni a expresarse y cualquier cosa que piensen, digan o hagan será considerada un grave delito que será convenientemente castigado. ¿Conclusión? Haga el favor de rendirse de una vez y pásese al bando de los otros, que es el bueno. Si quiere vivir tranquilo, claro. Y tranquila. Y tranquili. Ya verá cómo la vida le sonríe, será más feliz, no tendrá disgustos y podrá hacer todo lo que le plazca impunemente. Sin ningún problema.