Y ahora resulta que el atentado contra el bus del Borussia de Dortmund no lo hizo ni un islamista, ni un neonazi, ni tiene ningún motivo político. No, si las cosas no vuelven a girar, fue un individuo que preparó el ataque para hacerse millonario gracias a su suposición de que la muerte de los jugadores del equipo alemán haría bajar el precio de las acciones del club. Me pinchan y no me sacan sangre.
Lo segundo que he pensado cuándo esta mañana he escuchado la noticia ha sido: "¿Perdón? ¿Hacerse millonario bajando el precio de las acciones"?. Pues resulta que sí, que eso es posible con un producto financiero que le llaman "derivados". Es técnicamente complicado de explicar y de entender para los que no nos dedicamos al tema, pero lo intentaré. El ahora detenido contrató el pasado día 3 de abril un crédito por valor de 40 mil euros con los cuales financió la compra el pasado 11 de abril de lo que llaman "los derechos de venta de acciones a futuro" , en este caso del Borussia de Dortmund, equipo que cotiza en bolsa. El truco está en que él "apostó" a que las acciones bajarian de precio y que cuanto más bajaran de precio, más dinero ganaría él. Se calcula que hasta unos 4 millones de euros. Y la manera de hacer bajar las acciones era provocar una matanza, que eso provocara el pánico entre los accionistas y que todo el mundo empezara a vender.
La policía lo pilló por varios motivos. El primero fue que la pista de la autoría islamista no acababa de cuadrar. En las reivindicaciones había demasiadas cosas que no eran las habituales. El resto fueron varios detalles sin relación entre ellos y que acabaron ligando: 1/ el banco a través del cual operó sospechó de movimientos extraños y avisó a la policía, 2/ el terrorista (unas líneas más abajo le argumentaré porque lo califico así) compró las últimas acciones usando el wifi del hotel donde se alojaban los jugadores y donde también se alojó él... y donde se alojó para poder controlar los movimientos de los jugadores y poder planificar el ataque y 3/ los trabajadores del hotel sospecharon de él porque después del atentado, mientras todo el mundo corría arriba y abajo, él entró en el restaurante y con aquella calma se pidió un filete.
Y ahora vamos a lo primero que he pensado al escuchar la noticia y que es una cosa que ya pasaba cuando existía ETA y había un tiroteo con heridos o muertos Y es aquello del... "tranquilos, los hechos no tienen que ver con el terrorismo". Mire perdone, terrorista viene de terror y a mí me da mucho miedo que haya tipos como este (o como ETA en su momento) circulando por el mundo pensando que matando a un equipo de fútbol uno puede hacerse rico.
¿Eso quiere decir que desprecio la capacidad de matar del terrorismo islamista? No, quiero decir que no estoy más tranquilo sabiendo que quien le colocó tres bombas en un equipo de fútbol es un especulador de bolsa extremo y no un individuo que cree que matando un equipo de fútbol ganará el paraíso.
Vaya, que puestos a tener terror, me es igual si el terrorista que me lo provoca va por el mundo con un corán o comprando acciones. Y con respecto a los efectos, lo mismo le digo. Y no entiendo este tipo de relajamiento y alivio que tenemos cuando los atentados no los hacen "profesionales" en plantilla del terror sino aficionados "autónomos".
Ahora bien, si de lo que se trata es de autoengañarse, pues oiga, entonces adelante. Todo el mundo es muy libre de creerse que la realidad no es la que es.