Tal día como hoy del año 1847, hace 178 años, en París; moría Marie Duplessis, dama de la alta sociedad parisina que inspiraría la protagonista de la novela La Dama de las Camelias, del escritor Alexandre Dumas (hijo); y de la ópera La Traviata, del compositor Giuseppe Verdi. Su vida es considerada como uno de los máximos exponentes del movimiento cultural del Romanticismo francés (siglo XIX), una corriente artística que perseguía acabar con las rígidas normas del Clasicismo (dominado por la razón y por el empirismo) con el cultivo de valores como la libertad y el impulso de características como la fantasía, el misterio y el exotismo.

Marie Duplessis nació en 1824 en Nonnant-le-Pin, un pueblo de la Baja Normandía (noroeste de Francia), en una familia masacrada por la miseria económica y social. A los seis años perdió a su madre y a los doce años su padre la introdujo al mundo de la prostitución. Con catorce años huyó a París y se abrió camino en los prostíbulos más lujosos de la capital. Su juventud, su desenvoltura y, sobre todo, su extraordinaria belleza física la convertirían en objeto de deseo de poderosos hombres del mundo de la política y de los negocios. Uno de sus primeros amantes fue Antoine Agenor de Guiché, ministro de Asuntos Exteriores de Francia.

Durante su corta pero intensa vida se cultivó intelectualmente, y pasó de ser una niña nacida y criada en un entorno de miseria y rusticidad a una dama de la alta sociedad parisina. Con dieciocho años ya era la prostituta mejor pagada de París y, según sus biógrafos, podría haber ingresado más de 200.000 francos de oro al año. Durante esta época fue llamada "La Divina Marie" y habitualmente se la veía con su carruaje azul paseando por el Bois de Boulogne; cenando en el lujoso restaurante Maison Dorée o asistiendo a los estrenos que se representaban en los principales teatros de París, siempre con un ramo de camelias en las manos.

Marie murió prematuramente a los veintitrés años a causa de la tuberculosis (1847). No se sabe cuándo y cómo contrajo esta enfermedad, pero sí que se sabe que algunos de sus amantes la abandonaron por miedo al contagio. Cinco años después del deceso (1852), uno de estos amantes, Dumas hijo, se inspiraría en Marie para crear el personaje Marguerite Gautier, protagonista de La Dama de las Camelias, y un año más tarde (1853), Verdi, compondría La Traviata inspirándose en la novela de Dumas. Fue enterrada en el cementerio de Montmartre, y según los vigilantes siempre hay manos anónimas que depositan camelias sobre su tumba.