"Construir una senda
Que pueda recorrer
Detrás de un disfraz
Tartamudo ante la adversidad"
Héroes del Silencio
La táctica general del Gobierno de Sánchez es no creerse lo que les dicen. Ciertamente, puede ser un acto reflejo, algo que dimana de la seguridad de que es exactamente lo que sus interlocutores deberían hacer con sus promesas. Ahí andaban con lo del techo de gasto y la senda de déficit. A cara de perro en Suiza les dijeron que ya estaba bien de cachondeo, que prometer y no dar no es forma de pactar y que, por tanto, ni les iban a apoyar el mismo techo de gasto que ya se tumbó ni iban a negociar sin recibir antes lo que ya estaba acordado.
Pues nada, no hubo forma.
Al parecer se volvieron a Madrid pensando que si llevaban la cosa hasta el extremo, dado que la votación estaba prevista el jueves, podrían conseguir lo que el finde les negaron. Me encanta la fe que derrochan, aunque no sé muy bien a que dios la fían: ¿a la baraka, a las lentejas, a su cara bonita? El caso es que confían en salirse con la suya, aunque a ratos tengan que asumir que no será así. De ahí la retirada del techo de gasto de la votación del jueves del Congreso. Otro revolcón es demasiado. "Vamos a avanzar con determinación, con o sin apoyo de la oposición, con o sin concurso del poder Legislativo". Más allá del pasmo, va a ser que el recadito para los juntaires se cae por su propio peso. En una democracia no se puede avanzar hacia ningún lado sin el legislativo. Ni siquiera por la senda.
Ganar tiempo aunque no haya mayoría para legislar en el Congreso, ese es el plan. Tener el poder sin gobernar, traducen los críticos. También resultan pasmosos los argumentos para lograr el respaldo de otros grupos. Por ejemplo, el ministro catalán Urtasun, que debería conocer su tierra, pretende que es un error por parte de los partidos no apoyar lo que les dan porque permitiría tener un poco más de pasta —500 millones— en Catalunya a cambio de morder el anzuelo. Le recuerda a Junts que hace mal en perder esa pasta que Illa podría utilizar para dar más lustre a su gestión. ¿Qué ganaría Junts bajándose del todo para coger una migaja que además gestionaría el rival? Eso el ministro no lo aclara. No ponerte de felpudo del Gobierno que te da unas perras es un error, eso mismo le dicen a Feijóo: "¿los votantes del PP van a permitir que se pierdan 12.000 millones para que parezca un líder de verdad?". No sé yo si como lógica de persuasión es bueno llamar tontos y errados a aquellos a los que pides respaldo, ¡qué sabré yo de pactar!
A pesar de que los Presupuestos son la ley más importante y más política de cualquier gobierno; a pesar de que tradicionalmente en otros países los gobiernos que no son capaces de aprobarlos asumen que no tienen respaldo parlamentario y dimiten; a pesar de que no parece nada probable sacarlos adelante, los propios miembros del Gobierno afirman aquí y allá que "una segunda prórroga no será ningún drama". Es muy importante, en esta época de fragmentación, leer la información parcial y unirla al hilo de la trama: un deber periodístico. Ahora unan todo eso con el reconocimiento que se hace de que mientras haya flujo de fondos europeos, eso bastará para seguir gobernando. Periodistas de confianza de Sánchez cuentan que descarta las elecciones anticipadas aunque no salgan los Presupuestos. Tiene miles de millones en fondos europeos para ejecutar : “El proyecto económico del Gobierno está en la ejecución de los fondos”.
¿Ven como todo tiene cara y envés? Con dinerito fresco de Europa es más fácil sostenerse. Aunque en eso tampoco cuentan toda la verdad. Las entregas de ayudas de la Comisión Europea están ligadas a una serie de compromisos de renovación que se asumieron y que pasan por la aprobación de paquetes legislativos. ¡Ay, amigo! La información apunta a que para el quinto tramo de ayudas (6.500 millones) necesitarían aprobar la Ley de Servicios Sociales, la Ley de Familias y las reformas fiscales que los expertos indicaron. Para varias hay problemas: la de familia porque tanto Euskadi como Catalunya consideran que invade competencias, la fiscal porque no les apetece nada subir impuestos tal y como están las cosas. El sexto tramo precisaría aprobar ocho leyes más y así sucesivamente. ¿De verdad sin el legislativo? ¿De verdad sin apoyo de los grupos incluido Junts y, si me apuran, el díscolo Podemos?
Una acción de gobierno no puede basarse como única premisa sobre el dinero que se perdería si no se hiciera exactamente lo que quiere el gobierno. Así no quedaría sino respaldar a cualquier gobierno de cualquier manera hasta en negociaciones que terminan en cesiones que no se harán efectivas. Una fue votar a Armengol como presidenta del Congreso a cambio de dos comisiones de investigación —sobre el 17-A y la Operación Catalunya— que permanecían inactivas desde febrero y que curiosamente se van a reunir justo este jueves. La lista de incumplimientos de lo pactado con Junts es larga. Ellos la cifran en el 90% de lo acordado.
A los socialistas el techo se les quedó abierto, ya saben, ese techo solar que en Latinoamérica llaman con razón "quemacocos". Eso es lo que tienen encima y ni siquiera cerrándolo acabarán los calentamientos de cabeza. ¿En qué piensa Sánchez? En seguir en Moncloa. Eso no lo niegan ni los corrillos que lo odian ni los de sus acérrimos defensores. Aunque le queme el sol y le llueva encima.