Como dice la canción Vamos a contar mentiras, yo tengo ganas de escribir algunas verdades que no nos atrevemos a decir...

  • ¡Cómo duele pagar tanta pasta por las palomitas y que estén resecas!
  • La verdad es que he llegado tarde porque me estaba masturbando.
  • Todas las respuestas las tienes tú cuando entiendas cuál es la pregunta.
  • Hay más librerías que quioscos.
  • Por una extraña razón puedes estar tan llena como para no acabarte el segundo plato, pero no para comerte los postres.
  • El caso Alves me deja entender cómo tiene que cambiar el sistema para que se pueda denunciar.
  • Hazlo con miedo, pero hazlo.
  • El documental Eutanasia me ha hecho degustar como nunca la vida.
  • El destino no es solo cuestión de suerte.
  • Hay dos tipos de personas: las que se creen más inteligentes que las demás y las que no.
  • Sacar la rabia cura, pero también te entierra.
  • No hay dieta que aguante unos frutos secos.
  • Debemos seguir más la intuición y menos la razón.
  • Detrás de una gran mujer siempre hay otra gran mujer.
  • A veces hace más daño romper con un buen amigo que con un gran amor.
  • Un ex es un luto extraño porque la persona sigue viva, pero el amor ha desaparecido.
  • Todos tenemos tiempo para lo que nos apetece.
  • Para comprar sin mirar el precio tienes que ser capaz de trabajar sin mirar el reloj.
  • ¡Se nos va la olla con las fiestas de pijamas, en particular, y las fiestas infantiles, en general!
  • Si abandonas la lujuria un mes, ella te abandona tres.
  • A veces, nos obsesionamos con las cosas que no son importantes para no afrontar las que realmente lo son.
  • No es normal que te cobren 4 euros por un agua hirviente y una bolsita de té.
  • ¿Por qué como amigo o amiga eres tan simpático/a y como pareja no tanto?
  • Hay cosas que dan más asco que unas palomas comiéndose un vómito, y son las guerras que no pueden solucionarse con acciones buenistas.
  • Que tus amigas tienen que lograr ser más fuertes que tus demonios, como dijo Laura Weissmar al recoger su Goya por la película Salve María.
  • Esa sensación de cuando es domingo y muy de noche, y te has olvidado de limpiar la bata de tu hijo, y como te hace sentir que se ha acabado el fin de semana.
  • No puedes exigir cuidarte como si no tuvieras hijos o no trabajaras (lo digo por el monitor del gimnasio que me mira mal cuando ve que solo hago pesas una vez por semana).
  • Por la caridad entró la peste negra.
  • El gustito de arrancarte una costra de la cabeza aunque parezcas un mono.
  • Como puede ser que tus hijos, que no encuentran nunca el par de calcetines, sean capaces de encontrar un poco de cebolla en la judía hervida.
  • Por qué se llama océano Pacífico si no lo es.
  • No existe solo un "amor de mi vida".
  • El poder del adiós.
  • Seguro que hay más versiones de los hechos, pero yo me creo la tuya.
  • ¿Tan divertido como peligroso?
  • No te puedes sentir culpable por descansar.
  • Si lo has dicho con un par de copas, es que lo has pensado sobria, como dice La Vecina Rubia.
  • Justo cuando hayas dado la ropa de hace quince años es cuando se volverá a poner de moda, y lo sabes.
  • Cuelgas esta foto en las redes esperando que él o ella te mire.
  • Hay historias que ya han perdido al destinatario.
  • Si sabes decir las razones por las que estás enamorada, es que no lo estás.
  • ¿Te has fijado en que los animales no ríen?
  • A medida que vas creciendo, también crece tu público.
  • Tienes que bailar como si no te mirara a nadie.
  • Ser madre y padre es el trabajo que más estresa después de ver la serie Adolescencia.
  • Tienes que abrazarte a todas las edades, incluso si eres Demi Moore.
  • Que las lágrimas de un niño, siguen siendo lágrimas.
  • Todo lo que se puede pagar con dinero no es tan caro.
  • Trump puede ser siempre más ridículo y Musk, más rico.
  • No eres tú, es como me haces sentir.
  • Te pueden seguir haciendo violencia vicaria una vez que te han matado en vida matando a tus hijos.
  • Cuando criticas a tu hijo, él no deja de quererte, sino que deja de quererse a sí mismo.
  • Escuchando esa canción te soy infiel solo en mi cabeza.
  • Recuerda que cuando se acaba el papel de inodoro, siempre te puedes secar con el cartón.
  • A veces, lo único que necesitabas era más vitamina D.