El mural urbano por los presos políticos y los de Alsasua, obra del artista Elias Taño, pintado en un muro de un solar propiedad del Ayuntamiento de València, ha sido atacado a las doce horas de su finalización.
El grafiti ocupa unos cincuenta metros lineales. Ayer domingo, el colectivo artístico Atiro Hecho convocó una fiesta reivindicativa para pintar de manera colectiva un mural dedicado a los jóvenes de Alsasua y "a los presos políticos". La jornada contó con la participación de 25 personas y de algunos de los familiares de los jóvenes condenados por agresiones a unos guardias civiles y a sus parejas. La acción concluyó de noche sin incidentes.
El grafiti, que ocupa más de cincuenta metros lineales entre la Gran Vía de Ferran el Catòlic y el paseo de la Petxina, ha aparecido blanqueado este lunes. Los vándalos no habían actuado sobre una parte del lienzo y esta mañana un individuo que ocultaba su cara con un casco ha rociado con espray negro las frases que contenía la obra de Elías Taño.
Se da la circunstancia de que el pasado mes de junio una de las empresas concesionarias del servicio de limpieza de València borró el mural de Taño dedicado a los jóvenes de Alsasua. El operario justificó la acción argumentando que un vecino lo advirtió de que el grafito contenía alusiones a ETA. El Ayuntamiento sancionó a la empresa y ofreció un nuevo muro en blanco al artista para que pudiera rehacer el mural.
Cs exige a Ribó que elimine el mural
Por su parte, el grupo municipal de Ciudadanos del Ayuntamiento de Valencia ha exigido al alcalde, Joan Ribó, y a su socio de gobierno, el PSPV, la eliminación inmediata del mural porque considera que enaltece a los condenados por la agresión a dos guardias civiles y a sus parejas en Alsasua.
El portavoz del grupo, Fernando Giner, ha considerado "intolerable" el apoyo del consistorio a "alegatos sobre actos violentos" y ha comunicado este lunes que su grupo presentará una moción de urgencia al pleno, que se celebrará el jueves próximo, para solicitar que se eliminen las partes del mural que enaltecen a los condenados por agresión, a su parecer.