La titular del Juzgado de Primera Instancia número 25 de València, especializada en litigios hipotecarios, ha decidido suspender parte de su actividad después de la sentencia del Tribunal Supremo que contradice la jurisprudencia anterior en la materia, un hecho que califican de " grave situación de inseguridad jurídica".
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), la magistrada titular, con el apoyo de las cuatro juezas de refuerzo, ha suspendido las audiencias previas y vistas en procedimientos que se vean afectados por esta materia, los procedimientos ordinarios en que se ejerza acción de nulidad de cláusulas sobre gastos contenidas en escritura de préstamo hipotecario, impuesto de actos jurídicos y solicitud de reintegro a la entidad prestamista.
Esta suspensión se ha notificado en cada una de las actuaciones judiciales en los procedimientos afectados, han indicado las mismas fuentes.
Las juezas son conscientes de que la medida "supondrá retrasos en la tramitación y resolución de asuntos, con el consiguiente prejuicio que eso supone para las partes" si bien consideran que la decisión adoptada es la más "responsable" en las actuales circunstancias.
A la espera del Supremo
La sección segunda de la sala tercera del Supremo, en sentencia 1505/2018 del 16 de octubre, fijó unos criterios contrarios a la doctrina anterior al determinar que el sujeto pasivo del impuesto sobre actos jurídicos documentados, en el caso de escrituras de constitución de préstamo con garantía, es el prestador.
El viernes pasado, un día después de la publicación de esta sentencia, el presidente de la sala tercera emitió un comunicado en el cual, considerando que esta sentencia supone un "giro radical en el criterio jurisprudencial" y "teniendo en cuenta su enorme repercusión económica y social "se acordó dejar sin efecto todos los señalamientos con un objeto similar y convocar un pleno de la sala" con el fin de confirmar si este giro jurisprudencial tiene que ser o no confirmado"
Estas circunstancias provocan, a juicio de las juezas especializadas en la materia en la provincia de Valencia, "una grave situación de inseguridad jurídica, dado que la sentencia contradice la doctrina anterior y establece un nuevo criterio, la confirmación se cuestiona. todo queda a la espera de la reunión que el Tribunal Supremo tendrá el próximo 5 de noviembre para valorar si mantiene la reciente sentencia sobre las hipotecas.