El 11 de septiembre es un día marcado en el calendario de todos los catalanes. Se trata del día en que todo el país celebra la Diada Nacional de Catalunya, donde todos los catalanes salen a la calle para manifestarse y disfrutar de un día tan especial para el catalanismo cultural y político. ¿Ahora bien, por qué se celebra precisamente un 11 de septiembre?

El 11 de septiembre de 1714 tuvo lugar la última defensa de la ciudad de Barcelona ante las tropas borbónicas y, después de 14 meses de asedio, las tropas catalanas se rindieron. Esto fue el final de la guerra de Sucesión (1702-1714) en la cual los Borbones (Felipe V) y los Àustries (con el Archiduque Carlos) lucharon por toda Europa por los territorios que pertenecían a las coronas de Castilla y Aragón.

La celebración de una derrota

Es decir, los catalanes celebran la derrota de las instituciones catalanas ante las tropas borbónicas, ya que la Corona de Aragón daba apoyo a los Àustries. Precisamente, durante la Guerra de Succesió, el hermano del archiduque Carlos de Austria, el emperador José I, murió prematuramente a los 32 años sin descendencia masculina, haciendo recaer en él la corona imperial y convirtiéndose el emperador Carlos VI del Sacro Imperi Romanogermànic (1711-1740).

La muerte de José I provocó una serie de movimientos geopolíticos de las coronas europeas que participaban en la guerra de Sucesión, que culminaron con el Tratado de Utrech (1713) y la retirada de las fuerzas austriacistas de la Corona de Aragón junto con el mismo Carlos. El Tratado se basaba en un armisticio entre la corona francesa y la castellana con la corona británica, que daba apoyo a los Àustries.

Batalla de Talamanca, la última victoria militar catalana en la Guerra de Sucesión. Representación contemporánea de la vanguardia catalana / Devolució.

La traición de los Àustries

Otro hecho relevante fue la consecución de una mayoría parlamentaria en Gran Bretaña por parte de los Tories, partidarios de abandonar la guerra, enfrente de los whigs, favorables de seguir con la guerra contra Francia el año 1710. Eso allanó el camino para la retirada de tropas británicas a la guerra de Sucesión, a cambio que estos ganaran los territorios de Gibraltar y Menorca.

La guerra de Sucesión se lleva a cabo a consecuencia de la muerte sin descendencia del rey de los reinos de Castilla Carlos II el año 1700. Este muere dejando a Felipe V como heredero, nieto del rey francés Luis XIV. Ante esta situación, Leopold I de Austria (Habsburg) reclamó el trono para su hijo segundo el Archiduque Carlos de Austria, aduciendo lazos de sangre.

Así pues, el 11 de septiembre se consume la traición de la corona inglesa y de los Àustries con la derrota de la ciudad de Barcelona ante los borbones. Eso provocó la pérdida de territorios como Menorca, cedida a los ingleses, y la aniquilación del autogobierno y las instituciones de la Corona de Aragón con el decreto de Nueva Planta.

 

Imagen principal: La festividad del 2018 / Carles Palacio.