Unas 1.500 personas han rodeado el Centro Penitenciario del Puig de les Basses este domingo como protesta por el encarcelamiento de los líderes políticos catalanes, y para reclamar que "ninguna mujer caiga en el olvido". En especial se ha hecho referencia a Dolors Bassa, encarcelada en el centro figuerense y a Carme Forcadell.
Una de las participantes ha sido la exalcaldesa de Badalona, Dolors Sabater, que ha lamentado que la "situación patriarcal" también se deja ver entre los "presos políticos". "Cuando estaban en Madrid sólo recordábamos Estremera i Soto del Real y pocas veces teníamos en cuenta Alcala-Meco", ha subrayado Sabater.
Quien también se ha acercado hasta el centro figuerense ha sido la exvicepresidenta primera del Parlamento Anna Simó que se ha mostrado "convencida" que ninguno de los encausados por el 1-O que están cerrados pedirán el indulto en caso de condena. "Eso sería reconocer el delito, y no lo harán", ha señalado.