Òmnium Cultural ha conseguido volver a demostrar su fuerza desbordando la estación de França de Barcelona en la celebración de su Consejo de Ministros Popular, a escasos metros de donde estaba reunido el gobierno de Pedro Sánchez. Miles de personas se han acercado a la avenida Marquès de l'Argentera de la capital catalana para mostrar su rechazo a un gobierno que "mantiene presos políticos y exiliados y que niega el derecho a la autodeterminación de Catalunya".
Así lo ha denunciado el vicepresidente de la entidad soberanista, Marcel Mauri, que ha asegurado que la visita del ejecutivo de Sánchez es una demostración de "autoridad" y le ha avisado: "Usted tiene un problema y se llama 80%". Además, sobre lo que parece la propuesta estrella del día del presidente español de cambiar el nombre del aeropuerto del Prat por el de Josep Tarradellas, Mauri se ha preguntado si es esta su única propuesta para resolver el conflicto. "Son unos irresponsables. Nos quieren sometidos", ha lamentado en este sentido.
Mauri también ha leído una carta del presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, en la que ha asegurado que la gente movilizada es un "ministerio de la dignidad" y, citando a Angela Davis, ha apuntado que "hay que dejar de aceptar las cosas que no podemos cambiar para cambiar las cosas que no podemos aceptar". En este sentido, ha defendido que "con todo el sentido de la responsabilidad histórica, acusaremos al Estado".
Por otra parte, la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha denunciado que "ni el nombre del aeropuerto lo podemos escoger nosotros" y ha asegurado que "nos tratan como una colonia". Paluzie también ha señalado que el gobierno español tiene que "blindar" la ciudad y "enviar piolines" para poder venir a Barcelona, pero que, aun así, los catalanes "les hemos demostrado que no son bienvenidos". En este sentido, ha dicho que "hay que seguir firmes y adelante" para conseguir la República.
ACN
En el acto han participado varias entidades y colectivos como el grupo de periodistas Barnils, la plataforma Stop Maremortum, grupos ecologistas o representantes de la escuela catalana, el deporte o la literatura. También representados de todos los partidos independentistas, JxCat, ERC y la CUP.
Además, los presos y exiliados también han estado bien presentes a través de la hermana del president Carles Puigdemont, Montse Puigdemont, que ha sido recibida al grito de "Puigdemont, nuestro president". En representación de los familiares de los presos, ha querido agradecer los apoyos, ha hecho un llamamiento a estar "pacíficamente alzados" y ha exigido "política y no judicialización". "Para preservar el atado y bien atado son capaces de todo, aunque sea enfrentar la propia población", ha asegurado, denunciando también la participación de Vox en el juicio del 1-O.
Los manifestantes han llamado proclamas a favor de la libertad de los presos, así como "fuera las fuerzas de ocupación" o "ni un paso atrás", algunos de los cuales se han podido oír incluso dentro de la Llotja de Mar, donde están reunidos los ministros. El acto ha contado también con algunas actuaciones musicales como la de Pirat's Sound Sistema o la de la cantante Judit Puigdomènech.
La protesta de Òmnium, bajo un ambiente extremadamente pacífico y festivo, se ha producido paralelamente al resto de protestas de la ciudad contra la presencia del Consejo de Ministros, algunas de las cuales han acabado con cierta tensión y siete detenidos. Las movilizaciones continuarán este viernes por la tarde con una manifestación unitaria que empezará a las seis de la tarde en Jardinets de Gràcia.