En torno a 300 militantes de ERC han firmado un manifiesto donde piden una "renovación general de la cúpula dirigente". Los firmantes instan a conducir el partido hacia un modelo "más coral y colectivo, transparente y con más participación de la base, la estructura territorial y de los activos municipalistas". El manifiesto está firmado por algunas de las caras más conocidas de los republicanos como la vicepresidenta en funciones, Laura Vilagrà, los consellers en funciones Roger Torrent, Ester Capella, David Mascort, Meritxell Serret y Manel Balcells; Sergi Sabrià o la diputada al Congreso Teresa Jordà, el exdiputado y alcaldable por Barcelona Ernest Maragall, el exsecretario general Joan Puigcercós, el expresident del Parlament Ernest Benach, la exconsellera Alba Vergés, la exportavoz del partido Marina Llansana y varios diputados, senadores y cuadros territoriales actuales. Ni el president de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, ni la secretaria general de ERC, Marta Rovira, han firmado el manifiesto. Tampoco lo ha hecho Oriol Junqueras, que hace dos semanas abandonó la presidencia de la formación con la intención de optar al cargo en el congreso previsto para noviembre si obtiene el apoyo suficiente.
También lo firman otras personalidades de ERC como Xavier Vendrell, Juan Manuel Tresserras, Marta Cid, Oriol Amorós, Juan Ridao, Marta Villalta, Laia Cañigueral, Sara Bailac, Pilar Vallugera o Josep Maria Reniu; 14 alcaldes y alcaldesas como Lluís Puig, Alba Pérez, Marc Aloy, Carlos Brull, Marc Candela, Nuria Casanovas, José Casasses, Agustí Comas, Enric Forcada, Eloi Hernández, Nil Papiol, Sandra Marco, Jordi Parent, o Jordi Verdú. Así como el teniente de alcalde en Girona, Quim Ayats, o el concejal de ERC en Barcelona, Jordi Castellana. También constan decenas de concejales y el exalcalde Pau Ricomà, según avanza Nació Digital y ha confirmado ElNacional.cat.
En el texto, se afirma que el país "ha cambiado" y, por eso, se pide una reflexión "profunda" y la entrada "de aire fresco" a ERC. Los firmantes consideran que el congreso del 30 de noviembre es una "ventana de oportunidad" para culminar la "revisión" que el partido tiene la "responsabilidad histórica" de retomar para liderar el rearme estratégico del independentismo y el catalanismo soberanista republicano de base popular, tal como defienden.
El manifestado apunta la necesidad de tener una "transición tranquila", concepto que ya se le ha escuchado en Rovira. "Una ineludible transición interna tranquila tiene que ser la semilla para un nuevo impulso para esbozar un futuro inmediato ganador. Con generosidad, abertura y voluntad inclusiva y no excluyente. Con unidad interna y contando con el enorme capital político acumulado los últimos años", se subraya en el texto. Al fin y al cabo, llega un mes después de la ejecutiva extraordinaria que finalizó con el anuncio de la dimisión del expresidente de ERC, Oriol Junqueras, quien afirmó que, a pesar de dimitir, se veía con fuerzas para continuar al frente del proyecto republicano. Ni Junqueras ni algunos dirigentes afines al exlíder firman este manifiesto.
Dionís Guiteras, alcalde de Moià y miembro de la ejecutiva de ERC, ha explicado a Catalunya Ràdio que "ahora acaba un ciclo electoral y hay que empezar de nuevo, de cero, y qué mejor que hacerlo partiendo de la base de este manifiesto" que pide una renovación de la cúpula. Según Guiteras, este manifiesto no habla de nombres porque en ERC "no sobra nadie", e insiste en que tampoco "pide un paso al lado de nadie". El dirigente de ERC subraya que el texto solo pide que el congreso de ERC del próximo noviembre "parta de unas bases consensuadas, transparentes y democráticas, donde todo el mundo se sienta representado, porque nosotros queremos hablar de proyectos y no de nombres".
Junqueras, hacia el 30 de noviembre
Después de anunciar que dimitía, Junqueras corroboró su intención de presentarse a la reelección en el congreso del 30 de noviembre. Ahora se dedica a buscar "el aval renovado" de las bases republicanas, no renuncia "a nada", y da por hecho que se presentará a la reelección para presidir ERC. Su dimisión es, pues, solo temporal, porque está "dispuesto" a ayudar al partido "tanto como sea posible". Si cree que tiene un "aval explícito y renovado" de las bases, Junqueras se presentará a la reelección en el Congreso Nacional del 30 de noviembre.