Muchos ojos estaban puestos en José Luis Ábalos, que ha sido un protagonista colateral de la sesión del Congreso donde este jueves se ha votado y aprobado la ley de amnistía pactada entre el PSOE, Junts y ERC. El exsecretario de organización socialista, salpicado por el caso Koldo, decidió mantener el acta de diputado y marcharse al Grupo Mixto para defender su honorabilidad, pero prometió que mantendría la disciplina de voto del partido. Y así ha sido. Ábalos ha reaparecido en el Congreso de los Diputados y ha estrenado su nuevo escaño, situado en lo que se llama el gallinero (la parte más alta) del hemiciclo, donde se encuentran también cuatro diputados de Podemos, el BNG, UPN y CC. El exministro de Transportes ha cumplido con su palabra y ha votado a favor de la ley de amnistía.
Murmullo en la entrada al hemiciclo
Su salida de la bancada socialista en el Congreso, hace dos semanas, y el hecho de que el retorno haya coincidido con la celebración del pleno extraordinario en el que se tenía que aprobar la ley de amnistía, ha sido motivo de atención de los medios de comunicación, que han interpelado a Ábalos en el momento en que ha accedido al hemiciclo al final del pleno ordinario, en mitad de las votaciones para aprobar diferentes proposiciones de ley y mociones. Únicamente se ha limitado a decir: "La he defendido, gracias", cuando ha sido preguntado por la ley de amnistía, pero el exdiputado del PSOE no se ha detenido ni ha querido responder a ninguna otra pregunta. Ábalos ha entrado sonriendo en los pasillos del Congreso, ha accedido al hemiciclo, mientras se oía un murmullo, y se ha dirigido a su nuevo escaño, situado en la penúltima fila del hemiciclo, que será el mismo que ocupará en las próximas sesiones, y que hasta ahora ocupaba el diputado del BNG Néstor Rego, que ahora pasa a situarse en la misma parte central, pero dos hileras más abajo, entre Podemos y ERC. Ábalos ha sido saludado por la diputada de Vox Rocío Aguirre, por el comunista Enrique Santiago, diputado de Sumar, y por Cristina Valido, diputada de Coalición Canaria, que se sentará a su derecha. A la hora de las votaciones, cuando la mesa ha pronunciado su nombre, Ábalos ha respondido con un sí, sin estridencias.
Seguir para defender su inocencia
Después de que explotara el caso Koldo por la presunta corrupción de Koldo García, quien fue asesor de Ábalos cuando era ministro de Transportes y participó en una trama de cobro de comisiones por la compraventa de mascarillas y material sanitario investigada por la Audiencia Nacional, el exministro no accedió a las presiones de su partido, que quería que renunciara a su acta de diputado. En una comparecencia pública, sin embargo, Ábalos defendió su inocencia y anunció que seguiría como diputado y que se integraría en el Grupo Mixto.
¿Cuánto cobrará Ábalos ahora?
El paso de Ábalos al Grupo Mixto y el hecho de que abandonara la presidencia de la comisión de Interior, ha supuesto que el exdiputado socialista vea rebajado su sueldo como parlamentario y pierda algunos derechos. Según informó Europa Press, Ábalos cobraba un total de 94.621,52 euros al año, distribuidos en 14 pagas, cosa que suponía un total de 6.758,68 euros al mes. De esta cantidad, 3.142,14 euros corresponden a su sueldo como diputado, 2.018,41 euros en concepto de indemnización por ser elegido por una circunscripción diferente de Madrid, y 1.598,13 euros mensuales más por su condición de presidente de la comisión de Interior. Al abandonar este último cargo, el sueldo pasaría a ser de 5.160,55 euros al mes, por lo cual cobraría 72.247,70 euros al año. Eso supone que el exministro vería reducidos los ingresos anuales en 22.373,82 euros. Además, Ábalos ha perdido el despacho que tenía por ser presidente de una comisión, así como su derecho a tener un asistente personal y coche oficial, con el correspondiente chófer y escolta. Por el contrario, sí que podrá hacer uso de una tarjeta para gastar hasta 3.000 euros al año en taxis, según consta en las ayudas del régimen económico del Congreso.