La defensa del comisario jubilado José Manuel Villarejo ha denunciado este lunes durante el primer juicio por 'Tándem' que es "una causa absolutamente loca" ideada únicamente para "destruir" al agente por enemistarse con el CNI a su salida del "sistema". Ataviado con la toga de letrado y sentado junto a su otro abogado, Antonio José García Cabrera, Villarejo había anunciado en declaraciones a la prensa a su llegada a la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares que cabía la posibilidad de que ejerciera su propia defensa, pero de momento ha optado por dejar las cuestiones previas a su compañero.
"Esta causa es desde su propio origen una causa viciada, una causa preparada, una causa impulsada por el resentimiento, por el exterminio del enemigo, del considerado enemigo, por la expulsión del sistema de una persona que ha servido al sistema, a su país, a su patria", ha dicho García Cabrera. En este sentido, ha recordado que los hechos ahora enjuiciados, que versan sobre tres presuntos encargos realizados por particulares a Villarejo cuando era comisario sin embargo en la esfera de sus negocios privados, partieron de "una denuncia anónima elaborada por el CNI".
De hecho, ha avanzado que en este juicio intentarán acreditar, para que se una además a la pieza principal de 'Tándem', 'King', que en ella "intervino el CNI" porque no solo conocía lo que estaba ocurriendo, sino que los supervisó y tuteló. "Vaya incendio que ha generado, vaya destrozo en la sociedad española, a empresas honorables, a nuestro propio patrimonio nacional, por una causa absolutamente loca para destruir al señor Villarejo", ha señalado.
"Investigación prospectiva"
Hasta ahora, las grabaciones que Villarejo hacía de sus conversaciones con terceros han vuelto a constituir el eje central en la sesión de este lunes, como ya hicieron en el inicio del juicio el pasado mes de octubre. Así, varias defensas han insistido en que deben ser expulsadas del material probatorio porque fueron incautadas en un registro efectuado en 2017 que no cumplió con las salvaguardas legales.
La defensa del hijo de Villarejo, por ejemplo, ha instado a sacar de la causa estos audios esgrimiendo que obedecen a una "investigación prospectiva" que habría partido de una "denuncia anónima" de lo que después habría resultado ser una "falsa denunciante" sobre los hechos que configuran la pieza principal, 'King', lo cual afirma que sirvió de excusa para "escarbar" en la vida personal y profesional de su padre hasta dar con esas grabaciones.
El comisario Enrique García Castaño ha reclamado igualmente la nulidad de esos archivos sonoros por haberse obtenido de forma "subrepticia". Y ha añadido otro argumento, que Villarejo se presentaba a sus interlocutores bien como comisario bien como abogado, explicando que en el primer caso esas charlas no pueden considerarse prueba porque contienen una "provocación delictiva", puesto que empujarían a cometer o reconocer delitos, y en el segundo se enmarcan en la relación letrado-cliente que está protegida por el secreto profesional.
Otro denominador común del discurso pronunciado por las defensas en esta tercera sesión, que ya fue mencionado en las anteriores, es que la Audiencia Nacional carece de competencia para juzgar estas tres piezas de 'Tándem' porque no se acusa por el delito de organización criminal, el único que lo justificaría, lo que, conforme ha expuesto el abogado de García Castaño, es empeñar la causa al "futurible" de que se condene por ese ilícito en la pieza principal. De lo contrario, ha advertido, se viene una sucesión de recursos, apuntando en este sentido al Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
Además, las defensas de los empresarios y hermanos Fernando y Juan Muñoz Tamara, encausados por 'Pintor', han reclamado al tribunal que eche a la acusación popular que ejerce Podemos de esta pieza separada alegando que carece tanto de legitimación procesal, porque no estaría correctamente personado, como de "interés legítimo", una cuestión a la que se han sumado otros letrados y que ya fue planteada por la mujer de Villarejo, Gema Alcalá, aunque en su caso adujo que la formación 'morada' estaba haciendo un "uso electoral" de la información que obtenía al formar parte del procedimiento.
"Presiones al tribunal"
En sus declaraciones a la prensa, con su ya característica gorrilla y gafas de sol, Villarejo ha vuelto a expresar su confianza en la "independencia judicial" a pesar de las "presiones" que cree que se ejercen sobre el tribunal que le juzga por una causa que ha considerado una distracción respecto a otros asuntos, entre los que ha mencionado el caso 'Ghali'. "Soy un cacahuete andante", ha dicho.
En este procedimiento hay más de una treintena de encausados, si bien Villarejo es el principal acusado. La Fiscalía Anticorrupción pide para él una pena de prisión de 109 años, multas que superarían los 950.000 euros --a las que habría que sumar las indemnizaciones de las que respondería solidariamente junto a las otras personas que resultaran condenadas--, así como inhabilitaciones para ejercer cargo y empleo público y para el sufragio pasivo. En el banquillo de los acusados también se sientan el socio de Villarejo, Rafael Redondo, y su mujer, así como el comisario García Castaño, que se enfrentan a penas de 102, 86 y 87 años de cárcel, respectivamente.
Tres juicios en uno
En 'Iron' consta la pena más elevada. Anticorrupción reclama 57 años de cárcel y una multa de más de 700.000 euros para el otrora comisario por el encargo de un despacho de abogados de espiar a un bufete de la competencia. En 'Land', donde se ha investigado el encargo de labores de espionaje por la disputa en torno a la herencia del fundador de la urbanización de lujo 'La Finca', el Ministerio Público solicita 38 años y 10 meses de cárcel y una multa de 252.000 euros para Villarejo.
En cuanto a 'Pintor', que versa sobre el encargo que habrían hecho al comisario jubilado unos empresarios para extorsionar a un ex socio y al abogado de este último, el ex juez Francisco Javier de Urquía, Fiscalía pide 14 años de cárcel para Villarejo. Se trata del primer juicio a Villarejo por 'Tándem' pero no es su primera vista oral. Ya se enfrentó a un tribunal el pasado mes de enero por los delitos de injurias y denuncia falsa de los que le culpaba el ex director del Centro Nacional de Inteligencia Félix Sanz Roldán y por los que se arriesgaba a ser sentenciado a dos años de cárcel. En esa ocasión, el Juzgado de lo Penal Número 8 de Madrid decidió absolverlo. Por delante tiene todavía un largo recorrido judicial a causa del universo 'Tándem', algunas de cuyas piezas avanzan ya hacia la fase de juicio oral tras haber concluido años de instrucción.