La Audiencia de Barcelona ha absuelto a un joven manifestante acusado de atacar agentes del Cuerpo Nacional de Policía en octubre del 2019 durante las manifestaciones independentistas en Barcelona contra la sentencia del 1-O. La fiscalía le pedía tres años de prisión por| desórdenes públicos y atentado contra la autoridad para tirar piedras a los policías, pero el tribunal no considera demostrado que fuera él, vecino de Castellbisbal, quien lanzara las piedras y quien amenazó e insultó a los agentes desde una boca de metro en el paseo de Gracia.
Según la sentencia, hacia las 10 de la noche del 18 de octubre tres unidades del Cuerpo Nacional de Policía fueron a la plaza Catalunya a ayudar a sus compañeros, que se habían quedado sin material antidisturbios y estaban siendo atacados por una gran cantidad de manifestantes, muchos de ellos encapuchados. Cuando llegaron les tiraron piedras, adoquines, papeleras metálicas, palos de madera y otros objetos contundentes contra las furgonetas. Los policías estuvieron dispersando a los alborotadores hasta poco antes de las 11 de la noche.
No está probado que tirara piedras
Hacia aquella hora, los disturbios se concentraban a la confluencia de paseo de Gràcia con Gran Via. El acusado y una decena de personas más eran en la zona y alguien, quizás ni perteneciente a aquel grupo, tiró tres piedras contra agentes policiales, una de las cuales impactó en el chaleco de un mando. Inmediatamente, el grupo se desplazó a la boca del metro de paseo de Gracia. Desde el vestíbulo, increparon los agentes diciéndolos "fascistas", "hijos de puta", "bajáis aquí si tenéis cojones, que os mataremos".
⚠️La @policia deia que des de l'estació del metro, en Xavi de #Castellbisbal, els cridava "bajar que os vamos a matar" i la fiscalia li demanava 3 anys de PRESÓ!
— Alerta Solidària (@AlertaSolidaria) July 31, 2023
Un vídeo mostra el contrari: "dame el carné, detenido!"
Gràcies al vídeo tenim l'ABSOLUCIÓ!
🔥I també MOLTA RÀBIA!!! pic.twitter.com/7cgsGhzi3X
No obstante, los magistrados no consideran acreditado que el acusado fuera ninguno de los que increpó los agentes o tirara las piedras contra ellos. Además, los magistrados de la Audiència de Barcelona recuerdan que insultar a los agentes no es "lamentablemente" un delito, y las amenazas de muerte serían leves.