El juzgado de instrucción 2 de la Bisbal de Empordà ha absuelto los integrantes del grupo que arrancó unas ochenta esteladas en la población de Verges (Baix Empordà) la madrugada del 30 al 31 de diciembre pasado. La sentencia descarta que los nueve acusados juzgados el martes cometieran un delito leve de hurto, de daños o de coacciones. La jueza argumenta que, de acuerdo a la jurisprudencia y al criterio fijado por la fiscalía general del Estado, "no hay ningún delito al poner o al quitar símbolos independentistas" porque está "amparado" por la libertad de expresión.
La sentencia concluye que los nueve juzgados formaban parte de un grupo organizado que se desplazó hasta Verges la noche del 30 al 31 de diciembre con el objetivo de retirar esteladas y lazos amarillos de las farolas. "Dijeron que entendían que no estaban haciendo nada ilegal y que su intención era hacer una tarea de limpieza de la zona para neutralizar el espacio público", recoge la sentencia que también detalla que es lo mismo que los acusados que comparecieron al juicio dijeron en la sala de vistas.
En el caso de las coacciones, la acusación consideraba que no estaban "legítimamente autorizados" para descolgar las banderas. El juzgado lo descarta y se basa en jurisprudencia dictada por el TSJC y en el criterio de la fiscalía que considera que no hay delito al "poner ni quitar símbolos independentistas" porque está amparado por la libertad de expresión.
La jueza también concluye que los nueve integrantes del grupo no cometieron un delito leve de daños porque no se ha podido acreditar que destruyeran "de forma total o parcial" las banderas que arrancaron. "No consta la destrucción o inutilización de elementos independentistas, sino su mera retirada de la vía pública", argumenta la sentencia. También indica que no se sabe dónde fueron a parar las esteladas porque, aunque los Mossos dijeron en el juicio que "creían" que se las habían llevado los acusados, "se trata de una suposición".
La acusación particular, Assemblea Vergelitana per la Independència, solicitó que los procesados pagaran una multa de hasta 900 euros por un supuesto delito leve de daños o de coacciones. Además, también pidieron que pagaran una indemnización de unos 200 euros por el coste de los desperfectos.
Según explicó este martes la abogada de la acusación particular, Montserrat Vinyets, ocho de los acusados que comparecieron al juicio reconocieron que habían arrancado banderas pero estos defendieron que tenían el derecho a hacerlo. La acusación particular también subrayó que, en el caso de estas esteladas, la Assemblea entró una instancia en el ayuntamiento para poder colgarlas. Por eso, considera que los integrantes de esta brigada que las arranca de madrugada tendría que haber entrado también una solicitud en el ayuntamiento y, si no estaba de acuerdo con la respuesta, interponer un recurso contencioso administrativo. "Entendemos que si no se condena estamos dando margen a que cada uno se pueda tomar la justicia por su cuenta", dijo.
Antes que se conozcas la resolución del juicio, la acusación popular ya avisó de que no era positiva con la posible sentencia dado que ya había habido ataques similares a Verges. "No tenemos demasiado buenas expectativas en cómo pueda resultar este juicio, pero sí que la asociación tiene claro que estas conductas que se hacen de noche, por sorpresa y llevadas a cabo por personas que ninguna de ellas tiene domicilio en las comarcas gerundenses no pueden quedar en la impunidad", concluyó la abogada. Sólo un día más tarde, el tiempo le ha dado la razón.