Los grupos parlamentarios del PSC y Esquerra Republicana han acordado que la nueva operadora de Rodalies, que se tendrá que constituir antes acabar en el 2025, tenga una "dirección ejecutiva independiente de Renfe", en el marco del traspaso de Rodalies. Hay que diferenciar, por eso, la dirección ejecutiva del accionariado de la empresa, dónde el Estado sí que tendrá una participación mayoritaria del 50,01%, mientras la Generalitat un 49,99% después del acuerdo con los sindicatos para desconvocar la huelga. Eso implica que seguirá siendo una filial de Renfe, aunque Esquerra Republicana lo enmarcaba en un periodo transitorio de dos años con el fin de garantizar las condiciones actuales de los trabajadores.
La propuesta de resolución, que tendrá que ser votada este jueves por la tarde en el Parlament, también incluye lo que ya se había pactado entre las dos formaciones con anterioridad: la nueva sociedad "sería presidida y con una posición mayoritaria al consejo de administración por la Generalitat de Catalunya". Hay que matizar que la dirección general, el accionariado y el consejo de administración son tres órganos diferentes. El mismo punto indica que "el director general encargado de las tareas de gestión operativa será, a su vez, propuesto por el presidente del Consejo y ninguna decisión de la Junta General o del Consejo de Administración se tomará sin la participación y el visto bueno de la Generalitat". Como también recogía la propuesta inicial de ERC, se señala que "habrá que asegurar en todo momento el respeto y la salvaguardia de los derechos sociolaborales y de permeabilidad de los trabajadores y trabajadoras de ambas empresas públicas".
Nuevo plan de comunicación y protocolo dirigido a maquinistas
Por otra parte, socialistas y republicanos han transaccionado un segundo punto, que insta al Govern a "elaborar un plan de comunicación y un protocolo dirigido a los maquinistas y personal de atención presencial con el objetivo de gestionar y comunicar, a cada uno en sus funciones, a las personas usuarias de los convoyes y estaciones, las incidencias que puedan ocurrir en el servicio". Se añade que esta comunicación tiene que ser "fluida, comprensible y eficaz y dirigida en la lengua propia de Catalunya".
En este sentido, el punto también establece la creación de una aplicación móvil antes de acabar el año "para asegurar que esta información llega a las personas usuarias de manera práctica y actualizada en tiempos reales". Y señala que las operadoras y administradoras de la infraestructura tendrán que llevar a cabo formaciones relativas con esta comunicación entre sus trabajadores.