El acto en apoyo al referéndum por la autodeterminación de Cataluña organizado por Madrileños por el Derecho a Decidir se celebrará finalmente este domingo en el Teatro del Barrio, en la calle Zurita del madrileño barrio de Lavapiés.
Tal y como aseguraron los organizadores, tras la suspensión cautelar del acto por el juez José Yusty Barreche y la consiguiente imposibilidad de celebrarlo en la Nave de Terneras de Matadero, han encontrado un nuevo espacio, esta vez de titularidad privada. Se mantiene la hora, a las 12 horas, y el día, este domingo.
El juez ha ratificado este viernes la suspensión y ha recordado que es "público y notorio" que desde hace años el Derecho a decidir es un "lema o expresión "que se ha repetido innumerables veces por los movimientos y grupos secesionistas que propugnan un referéndum no autorizado para el 1 de octubre en Cataluña, con la finalidad reiteradamente proclamada de lograr la separación de dicha región del resto de España".
A su juicio, "no se trata por tanto de una cuestión política, aunque tenga efectos indudables en tal ámbito, sino de utilización de bienes municipales, que deben servir a los intereses generales". Además, añade que la libertad de expresión se puede ejercer en "multitud de lugares, como cines, teatros o incluso en las calles y plazas públicas".
Acusan al juez de "excederse"
Según expresó en rueda de prensa uno de los responsables que registró la petición en el Ayuntamiento, Pedro Casas, el recurso de los populares quería prohibir la cesión del espacio municipal, mientras que el auto de Yusty prohíbe el acto. "El recurso del PP se ciñe a que se suspenda un acto administrativo; se pide que se paralice la cesión del local, pero el juez va mucho más allá de lo que los propios demandantes le pedían", ha recriminado.
Para Casas resulta "curiosísimo" que se resuelva un recurso contencioso-administrativo con "esa rapidez". "En un caso concreto de libertad de expresión un juez se toma libertad de en menos de 24 horas hacer un auto", indicó, para añadir a continuación que se trata de algo "aberrante".
"Dice debo suspender el acto, no la cesión... eso es pasar límites, cuando el juez se pronuncia sobre algo que no le han pedido; es pasarse siete pueblos", reprochó.