Los padres de un niño de una escuela de Terrassa denunciaron el centro por "haber simulado un referéndum" para escoger al delegado de la clase. Esta es una de las denuncias que recoge el periodista de El Món, a Quico Sallés, en su artículo que han recibido los servicios jurídicos y los de inspección del departamento de Enseñanza por el, supuesto, "adoctrinamiento" en la escuela pública catalana.
Una de ellas, la más surrealista, es la denuncia que hicieron unos padres a un colegio egarense, del cual no se ha querido suscitar el nombre, para escoger a los delegados de clase "simulando un referéndum". La denuncia no trascendió y el expediente se cerró porque escoger a quien será el delegado y sub-delegado de clase es un procedimiento que se realiza cada principio de curso. Por su parte, los padres consideraron que "escoger al delegado de clase es un referéndum y un acto político". Sallés explica que los padres argumentaban que "realizar un acto que no estaba dentro de la legalidad y aplicarlo a la clase, en aquel momento, era adoctrinamiento".
Entre las denuncias, también aparece una por "enseñar alumnos a construir farolillos con la estelada". Este es un hecho que sucedió el año 2013, en Vic, donde había un stand de la ANC donde se enseñaba a hacer farolillos con la estelada, para la Cabalgata de Reyes, y al lado había otro stand donde aparecía el logotipo del AMPA. Aunque no tenían nada que ver entre ellos, a causa de una fotografía, se relacionó que los niños de aquella escuela estaban en el lugar de la ANC realizando las manualidades. Las más habituales, señala Sallés, son denunciar porque "en clase de catalán no dejan responder en castellano cuándo se pregunta al alumno" o quejarse por los letreros con mensajes políticos de carácter general en las escuelas como "democracia" o "Escuela de todos".