Hace justo dos años que se detectó el primer caso de coronavirus en Catalunya. Fue el 25 de febrero de 2020, este domingo hace 733 días. Alba Vergés era la consellera de Salut. De hecho, lideró la gestión de la pandemia durante casi un año y medio, hasta finales de mayo de 2021 cuando su secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon, la sustituyó al frente del departamento. Actualmente, Alba Vergés es vicepresidenta primera del Parlament. A Vergés le tocó gestionar la parte más difícil de una pandemia que nos pilló a todos por sorpresa y de la cual nadie sabía absolutamente nada. No sabíamos como se tenía que tratar, tampoco cuánto duraba el periodo de transmisión ni cómo podíamos prevenir el maldito virus que en Catalunya ha provocado la muerte de más de 26.500 personas y ha contagiado a casi 2.400.000. Alba Vergés nos explica cómo se las apañó para improvisar un ejército de profesionales de la salud de la noche a la mañana. De repente, la emergencia obligó a multiplicar las camas de UCI, a ampliar las camas de hospitalización, tuvieron que buscar material a contrarreloj porque faltaba de todo: equipos de protección individuales (EPIs), mascarillas... En plena pandemia llegó la campaña electoral del 14-F. Alba Vergés decidió no hacer campaña para poderse centrar únicamente en plantar cara a la tercera ola de covid y en acelerar la vacunación de los catalanes que apenas acababa de empezar en las residencias y entre el personal sanitario. La noche del martes, 9 de febrero de 2021, mientras trabajaba con su equipo en el despacho, empezó a recibir llamadas. Eran amigos y conocidos de la entonces consellera de Salut que estaban viendo el debate electoral en TV3 y le dijeron que la candidata de Junts, Laura Borràs, acaba de soltar el nombre de Josep Maria Argimon para sustituirla al frente de Salut. "Fue un juego sucio en el que creo que no se tiene que entrar. No había salido ningún nombre, estábamos en plena tercera ola, acabábamos de iniciar la vacunación para toda la población, estábamos en pleno despliegue... ¡Hombre, no gusta esto! La candidata de Junts suelta un nombre para sustituirme", recuerda muy dolida Alba Vergés. Por otra parte, a diferencia de Argimon que dice que el trabajo de conseller no le gusta mucho, que es aburrido e intelectualmente no muy estimulante, Alba Vergés dice "yo soy de apasionarme por las cosas, soy una enamorada del sistema de salud, a mí no me faltaron estímulos ni tuve tiempo de aburrirme". Vergés tiene claro que "para hacer bien un trabajo, el que sea, te tiene que gustar". No os perdáis la entrevista a la exconsellera de Salut en este vídeo:
Llegamos a tener 2.000 muertes a la semana y 1.529 personas en la UCI
Hace dos años nadie se esperaba la magnitud que ha acabado teniendo la pandemia de covid-19. Alba Vergés recuerda perfectamente el primer caso de coronavirus en Catalunya. Se confirmó el 25 de febrero de 2020 a Eleonora, una joven italiana de 36 años residente en Barcelona. Acababa de llegar del norte de Italia. Fue un caso leve, pero, por precaución, fue ingresada en una zona de alto aislamiento del Hospital Clínic de Barcelona. Al cabo de poco más de quince días, confinaron a 70.000 personas de la Conca d'Òdena, entre ellas a toda la familia de la consellera Vergés que vive en Igualada. Su hija pequeña tenía poco más de un año y el mayor, siete años. Vergés dice que fue el punto de inflexión, "en aquel momento, el país entero se dio cuenta de que era un tema grave de verdad y que ya lo teníamos aquí". La exconsellera explica que fue muy complejo de gestionar. "Llegamos a tener 2.000 muertes a la semana y a 1.529 personas en la UCI, pero tenemos un sistema de salud que tiene capacidad de responder si le das confianza y herramientas. Lo que hicimos fue muy bestia. Al principio veíamos subir las cifras y no sabíamos cuándo bajarían", recuerda Vergés. "Luché mucho para que la gente no estuviera sola en momentos tan difíciles y complicados como aquellos. Al principio mucha gente estuvo sola, sólo con la mano de la enfermera, pero en cuanto pudimos introdujimos de todo... las tablets para hablar, las visitas a las residencias (aunque fueran cortas y con todo el buzo puesto y toda la protección que hacía falta), era muy complicado, pero luché mucho para evitar que la gente pasara sola momentos tremendamente difíciles", recuerda Vergés en este fragmento de la entrevista:
Al conseller Argimon le dejamos unos porcentajes de vacunación que daban un colchón de seguridad
La exconsellera no puede disimular el disgusto que se llevó una noche de la campaña electoral mientras trabajaba en su despacho gestionando la tercera ola de covid y la vacunación de los catalanes. De repente le empezó a sonar el teléfono para decirle que Laura Borràs, candidata de Junts, acababa de dar el nombre de Josep Maria Argimon para sustituirla al frente de la conselleria en el debate electoral de TV3. "Fue juego sucio, estábamos en plena tercera ola, acabábamos de iniciar la vacunación para toda la población, estábamos en pleno despliegue...", recuerda y lamenta Alba Vergés en esta entrevista en ElNacional.cat. Finalmente pedimos a la exconsellera de Salut que ponga nota a la gestión del conseller Argimon. También le preguntamos si cree que le traicionó cómo dicen las malas lenguas. "Al conseller Argimon le toca vivir otra etapa de la pandemia y es muy diferente porque le dejamos unos porcentajes de vacunación que le daban un colchón de seguridad", dice Vergés. A la exconsellera también le preguntamos qué le pareció que Salvador Illa abandonara el Ministerio de Sanidad en plena pandemia para ser candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat. Podéis ver su respuesta, también la nota que pone al conseller Argimon y si cree que le traicionó en este fragmento de la entrevista:
La alternativa de no hacer nada era no proteger a la gente y no salvar vidas
Esta semana hemos sabido que Antifrau ha denunciado irregularidades en una compra de mascarillas y otros materiales sanitarios. La Oficina Antifrau da 30 días a la Generalitat para aclarar un "encargo irregular" de 35 millones de euros. La operación fue hecha a través del Institut Català de la Salut (ICS) cuando Josep Maria Argimon era director gerente. Alba Vergés recuerda que "a nivel mundial faltaba de todo, faltaba material y lo tuvimos que hacer todo para salvar vidas que, en aquel momento, quería decir proteger también a los profesionales sanitarios y a los trabajadores de las residencias. La alternativa de no hacer nada no podía existir porque quería decir "no tener mascarillas para los médicos, enfermeras, profesionales de las residencias, no tener batas, no tener nada y, por lo tanto, habría querido decir no proteger a la gente y no poder salvar vidas. La alternativa de no hacer nada no podía ser de ninguna de las maneras". Vergés, admite que fue una operación de alto riesgo, pero justificada por lo que estábamos viviendo y sufriendo todos y asegura que no hubo irregularidad alguna.