Las relaciones entre Israel y el Estado español hace meses que se están tensando por las diferencias entre los dos Ejecutivos con respecto a la guerra en Gaza. Después de que el presidente español, Pedro Sánchez, anunciara que el próximo 28 de mayo España reconocerá el Estado palestino, la respuesta Israelí no se ha hecho esperar. Por una parte, se ha llamado a consultas a la embajadora española en Israel y este viernes el ministro israelí de Exteriores, Israel Katz, ha informado de que se ha prohibido en el consulado de España en Jerusalén "prestar servicios a los palestinos". En una entrevista en RAC1, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha advertido que estas respuestas de Israel no harán cambiar el rumbo del Gobierno: "Nadie nos atemorizará y ni nos hará rebajar nuestras exigencias de alto el fuego, la liberación de los rehenes y el reconocimiento de Palestina".
Preguntado por los efectos del anuncio de Katz, Albares no ha querido entrar en detalles, subrayando que el anuncio del ministro israelí ha tenido lugar pocos minutos antes de que él saliera en antena. Sin embargo, el ministro español ha avanzado que protestará ante Israel si impide al Consulado General en Jerusalén atender a los palestinos de Cisjordania.
Después de que Noruega, Irlanda y España hayan anunciado el reconocimiento de Palestina, Israel llamó a sus representantes diplomáticos en el país a consultas para reñirlos. Esta bronca la grabaron, hecho que ha levantado críticas contra el Estado israelí. Sobre estos hechos, Albares ha afirmado: "Está fuera de los usos diplomáticos filmar las consultas con un embajador". El ministro español ha rechazado este tipo de política y ha recuperado unas palabras de Barack Obama, expresidente de los Estados Unidos: "Cuando ellos van bajo, nosotros volamos muy alto".
Niega acusaciones de antisemitismo
Además del anuncio de reconocer el Estado palestino, las declaraciones de la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, sobre Palestina han encendido todavía más la indignación israelí. Concretamente, Díaz utilizó el eslogan propalestino "desde el río hasta el mar" en un vídeo. Desde el gobierno de Israel se ha denunciado el uso de este mensaje, que consideran antisemita. Con respecto a estos hechos, Albares ha recalcado que "en el Gobierno de España no hay antisemitas" sino que es "un gobierno tolerante, plural, diverso que no acepta ningún discurso de odio, incluido el antisemitismo."
Argentina y España
En materia de política internacional, la Moncloa tiene otro frente abierto: la relación con Argentina. Concretamente con su presidente, Javier Milei. Albares ha defendido la hermandad entre el pueblo español y el argentino, pero ha subrayado: "Siempre estaré vigilando en defensa la dignidad de las instituciones españolas. Yo no sobreactúo, sino que actúo y ante las declaraciones del domingo había que actuar".