Junts per Catalunya cierra el acuerdo con el PSOE y hará a Francina Armengol presidenta del Congreso de los Diputados. Los flecos están cerrados. El secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, ha anunciado un principio de acuerdo ante la ejecutiva telemática que ha celebrado este jueves por la mañana —dos horas antes de la sesión constitutiva del Congreso—, avisando que se estaba a la espera de tener ligada la documentación para poder acabar de dar luz verde al acuerdo con los socialistas. Lo que hacía falta, pues, eran "hechos comprobables", tal como advertía el president en el exilio, Carles Puigdemont. Y estos han llegado: el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, ha registrado esta mañana en el Consejo de la Unión Europea (dirigida a la presidenta del órgano guardián de los tratados europeos) la petición para que la lengua catalana, vasca y gallega sean oficiales en las instituciones de la Unión Europea, según ha podido saber ElNacional.cat. La documentación ya cuenta con los sellos correspondientes que certifican que la solicitud ha entrado y se inicia el trámite para ser aprobada en un pleno del Consejo de Asuntos Generales de la UE el 19 de septiembre, que supondrá un avance sustancial para el catalán. Fuentes confirman a este diario que el equipo del president en el exilio, Carles Puigdemont, tiene el escrito que certifica que se ha materializado esta petición.
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Este punto trascendental se suma a otros tres: el uso del catalán, gallego y vasco en el Congreso de los Diputados en igualdad de condiciones al castellano —un compromiso que, presumiblemente, mencionará Armengol cuando ya sea elegida presidenta de la cámara española—, la reapertura de la comisión de investigación de las cloacas del Estado y el impulso de una comisión de investigación para los atentados que tuvieron lugar en Barcelona y Cambrils el pasado 17 de agosto de 2017. La condición sine qua non que ha planteado Junts para acabar de cerrar el principio de acuerdo era, precisamente, la petición de oficialidad de la lengua catalana en el marco de las instituciones europeas. El acuerdo permitirá arrancar la decimoquinta legislatura y lo hará con la elección de Francina Armengol como presidenta del Congreso, que contará con 178 votos favorables (PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV y el BNG). Este acuerdo, sin embargo, no presupone el apoyo de Junts a la investidura. Esto será otra pantalla.
Los efectos de la oficialidad del catalán en la Unión Europea
La petición para que la lengua catalana se convierta en oficial en la UE supone un cambio de paradigma. Un paso que no se había producido en 40 años. El estatus que puede adquirir la lengua puede tener otras derivadas, como por ejemplo el freno a las sentencias que obligan a instaurar un 25% del castellano en la escuela catalana, puesto que el catalán tendrá un rol mucho más importante en el contexto europeo, equiparable al que tienen el inglés, el francés o el alemán. La petición no recoge nada del valenciano.
El miércoles, el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, anunciaba ante los diputados y senadores del PSOE su compromiso de impulsar el uso del catalán y el resto de lenguas cooficiales del Estado en las instituciones de la Unión Europea. De hecho, explicitaba que lo haría aprovechando la presidencia de la Unión Europea que tiene España durante este último semestre del año. En todo caso, la petición para que la lengua catalana tenga el estatus de oficialidad en la Unión Europea (y se sume a las 24 que hay) es una pantalla más avanzada de lo que Sánchez había declarado. La legislatura se pone en marcha y lo hará con una presidencia del PSOE en el Congreso de los Diputados, que contará con el beneplácito de Junts per Catalunya. Y ahora empezará la nueva fase: la batalla decisiva por la investidura de la presidencia del Gobierno.