El teniente de alcaldía de Seguretat de l'Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha negado que la Guardia Urbana, los Mossos y la policía española hagan identificaciones según el color de piel. Alcalde respondiendo a las preguntas de los medios sobre las identificaciones "racializadas" ha contestado rotundamente: "Niego la mayor".

También ha asegurado que los dispositivos policiales de los cuerpos tienen como objetivo detener presuntos delincuentes reincidentes, citando de ejemplo el Pla Tremall, que ha reunido un total de 1.677 detenciones, 291 del total se habrían sentenciado con ingreso en la prisión. A pesar del total de 20 personas detenidas estas últimas dos semanas por no tener papeles, el teniente de alcaldía ha menospreciado las denuncias por identificaciones según el color de piel, tildándolas de "intoxicaciones".

SOS Racismo acusa el Ayuntamiento de Barcelona de actuar de forma "hipócrita"

Batlle responde a las diversas críticas que ha recibido el Plano Trasmallo desde entidades por los derechos humanos y contra el racismo, entre de ellas Irídia, que criticó con dureza: "Es intolerable la colaboración de la Guardia Urbana y de los Mossos en estos operativos que buscan personas migrantes en los espacios públicos". También se pronunció al respeto SOS Racismo, que tilda de hipócrita al gobierno municipal, ya que se hace eco de la campaña "Paráis de pararme" promovida por la entidad antirracista para parar identificaciones por perfil racial, pero después "la Guardia Urbana lo ejerce y el Ayuntamiento lo silencia"

Mossos d'Esquadra reconoció identificaciones por perfil racial

En la rueda de prensa el comisario de los Mossos d'Esquadra, Carles Anfruns, se ha desentendido de cualquier responsabilidad sobre los operativos de extranjería, y lo ha traspasado a la policía española. Irónicamente, el pasado mes de junio, el jefe de los Mossos, Eduard Sallent, reconoció abiertamente que la policía catalana hacía identificaciones por "sesgo étnico" y se comprometió para corregirlo.

Estas operaciones de extranjería se rigen por identificaciones por perfil étnico, y han sido cuestionadas constantemente, tanto a nivel local como internacional. De hecho, en el 2018 el grupo de trabajo de expertos de la ONU sobre personas afrodescendientes calificó estas identificaciones de "problema endémico del estado español".

La Oficina de Derechos Civiles y Políticos de la Generalitat reclamó en el 2020 acabar con estas prácticas: "El objetivo es una policía coherente con una sociedad en constante cambio y capaz de ofrecer un servicio público de seguridad aplicable y accesible a toda la ciudadanía, independientemente de su origen étnico y cultural".

Imagen principal: Albert Batlle delante de un policía local de Barcelona. - ACN