El coordinador general del PP, Xavier Garcia Albiol, y los líderes de Ciutadans, Albert Rivera y Inés Arrimadas, han apadrinado la presentación pública de la plataforma unionista Concordia Cívica. Una plataforma que reúne representantes de entidades unionistas y que nace para combatir "el adoctrinamiento" del independentismo.
La presidenta de la plataforma, la catedrática de Derecho Constitucional Teresa Freixes, ha abierto el acto que ha contado con las intervenciones de portavoces de entidades que se han adherido a Concordia Cívica. Por ejemplo, Societat Civil Catalana (SCC), el Grupo de Periodistas Pi i Margall, Empresarios de Catalunya, Convivencia Cívica Catalana y el Centro Libre Arte y Cultura, entre otros.
La narcotización de los medios de comunicación a base de subvenciones, la manipulación de los niños en las escuelas, la política de exterminio del castellano, el proceso como un movimiento elitista, clasista y casposo, una estrategia para tapar el caso Pujol... Incluso, la reunión del exvicepresidente Carod Rovira con negociadores de ETA a Perpiñán, como mal menor y reproches al PSC de quien "nunca se sabe donde está".... Las intervenciones de los ponientes han jugado con estos conceptos con el objetivo de denunciar la alienación de aquellos que no son independentistas en Catalunya.
"Cambiando la bandera pero nos encontramos con la misma mierda de siempre", ha exclamado el periodista Ramon de España que también ha tildado la CCRTV de instrumento "de agitación". Una de las intervenciones más aplaudidas ha sido la del periodista Joan López Alegre, que ha sido quien ha asegurado que el proceso es una estrategia para tapar el caso Pujol.
Entre los momentos álgidos, la salida de un periodista de la sala después de enfrentarse con alguien del público y la confusión de uno de los ponentes y miembro de la plataforma, Clemente Polo -Asociación Salvar el Archivo de Salamanca y entidad 12 de Octubre-, que ha confundido el Movimiento Nacional Sindicalista con el Secesionista.
"Desmontar el engaño"
Freixes ha pedido a los ciudadanos que sumen esfuerzos para "desmontar el engaño" independentista y ha leído un fragmento del manifiesto fundacional en que se acusa al Govern de haber actuado "sectariamente y no para todos los catalanes" y "poniendo en riesgo la convivencia". Ante eso, defiende que los constitucionalistas se han convertido en un "ejemplo de civismo, contención y 'fair play'" y considera que ha llegado el momento que la ciudadanía "restaure el tejido social catalán que el poder nacionalista" ha "empobrecido".
El manifiesto afirma que Catalunya "ha sido gobernada ininterrumpidamente por fuerzas políticas nacionalistas" y añade que la actual coalición de JxSí "lejos de ser un movimiento revolucionario y de cambio, es el establishment". Afirma que en los últimos años, el Govern ha hecho una "huida adelante" y ha perseguido "una utopía independentista basada en la confrontación con los ciudadanos españoles y en la fractura interna que se está constatando".
En contraposición, defiende la reacción de los constitucionalistas con un "perfil bajo", que ha criticado que desde el independentismo se ha interpretado como un "símbolo de debilidad, una concesión inevitable de la independencia". Critica también que esta independencia se ha vendido "como la solución de todos los males".
La organización pone de manifiesto que, de manera "gradual y emergente", la sociedad civil se ha ido reagrupando en torno a la creencia de que lo que une a los ciudadanos es "más y mejor" que el que los separa y, partiendo de este punto, constatan que "corresponde a la ciudadanía restaurar el tejido social catalán que el poder nacionalista ha empobrecido intencionadamente".
Es de esta reflexión de la que nace la idea de impulsar una entidad que agrupe esta idea colectiva. El texto explica que un conjunto de personas "representativas" de este tejido cívico se ha reagrupado en torno a Freixes "para trabajar mano a mano, conjuntamente" para defender los derechos colectivos y la "concordia cívica".