El alcalde de Folgueroles (Osona), Xavier Roviró, se ha mostrado indignado en el programa Tot es mou de TV3 por la forma como la Guardia Civil actuó ayer en Sant Pere de Torelló para detener a uno de los miembros del CDR, que trabaja en una masía y es muy conocido en la comarca. Especialmente le ha indignado que los efectivos de la Guardia Civil amenazaron también a un niño de 10 años, hijo del detenido, y lo obligaron a tenderse en el suelo en calzoncillos al lado de su padre, mientras lo amenazaban con arma larga.
Roviró ha explicado que acudió a la masía después de la detención, con la madre del niño, y que este les explicó que la Guardia Civil había entrado en la casa a las 7 de la mañana reventando las cerraduras y gritando "¡Todos al suelo!". "Cuando me explicó eso el crío tuve rabia, y cuando me dicen que aquí se cumplen los derechos humanos me caliento, porque aquí no los han cumplido y no ha habido presunción de inocencia". ha insistido Roviró.
El alcalde ha recordado que el detenido es vecino de siempre de Folgueroles y que está considerado una buena persona. "Se le conoce mucho aquí y se le considera un hombre de paz", ha insistido.
Roviró ha concluido la conversación visiblemente enfadado con la actuación policial. "Tenemos la sensación de que estamos en una dictadura, de cabo a rabo," ha apuntado.