Negociaciones contra reloj, propuestas in extremis y dudas hasta el último minuto. Cuando no hace ni siquiera un año de las últimas elecciones municipales, Badalona vuelve a estar obligada a un pleno incierto, a pesar de esta vez el acuerdo entre Guanyem y el PSC podría estar más cerca que el junio pasado con una fórmula para compartir la alcaldía. Después de que el pasado 21 de abril el ahora ya exalcalde Àlex Pastor fuera detenido para saltarse el confinamiento y conducir bebido, la ciudad vuelve a revivir una investidura abierta hasta el último momento.
El pleno está convocado para este martes a las 12 del mediodía. Hasta entonces los partidos de izquierdas tienen tiempo para tratar de cerrar un acuerdo que evite que el popular Xavier Garcia Albiol sea re escogido alcalde de la ciudad al ser la fuerza más votada. Socialistas y Guanyem siguen negociando, pero todavía hay escollos que humean, el principal el reparto del mandato. A última hora de la noche todavía no se había conseguido cerrar el acuerdo.
Los recelos, las desconfianzas y las posiciones enrocadas entre los partidos de izquierdas de Badalona han provocado que a escasas horas por la sesión plenaria, todavía nadie ose poner la mano al fuego para decir quién será el próximo alcalde de la cuarta ciudad más poblada de Catalunya. Todo cuelga todavía de un hilo. Después de días con las negociaciones enrocadas, en las que se ha oído propuestas de todos colores –desde gobierno de unidad liderado por los socialistas o alcaldías compartidas PSC-ERC hasta "vicealcaldías plenipotenciarias" para Dolors Sabater, pasando por tenencias de alcaldía que han ido arriba y abajo–, el PSC ha lanzado este lunes una última propuesta que ha acabado de remover el mostrador de ajedrez.
Alcaldía compartida Sabater-Guijarro
A pesar de negarse desde el primer día a investir Dolors Sabater como alcaldesa, los socialistas han propuesto una alcaldía compartida: los primeros 18 meses para la candidata de Guanyem y los 18 restantes para el socialista Rubén Guijarro. La propuesta ha sido puesta sobre por primera vez por el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, en una rueda de prensa celebrada este mediodía. Poco después, la sección local del partido ya la trasladaba a la reunión de negociación convocada con todos los grupos badaloneses menos el PP.
Eran las tres de la tarde, una hora antes de la rueda de prensa que tenía convocada Ganyem Badalona para definir su posición antes del pleno. Dolors Sabater tenía previsto salir telemáticamente ante los medios de comunicación para poner presión al PSC y avisarlo de que no había otra opción que su investidura o la de Albiol. "Mantenemos a Dolors o Dolors", apuntaban fuentes del partido a primera hora de la mañana, que también aseguraban que si no era así preferían "hacer oposición" al líder popular. Los de Sabater salieron escaldados del último pleno de investidura, donde el PSC los puso en la tesitura de votarlos a ellos, aunque les habían hecho un año antes una moción de censura y que tenían más concejales, o que Albiol saliera escogido.
Un año después, Ganyem Badalona ha defendido que el proyecto de los socialistas está agotado y se ha negado desde el primer momento a repetir el mismo error del pasado. Por eso, desde el inicio de las negociaciones han insistido en que el liderazgo de Sabater no era negociable. La propuesta del PSC, sin embargo, ha cambiado las cosas. La misma candidata ha celebrado que los socialistas levantaran el veto a su persona y se ha mostrado dispuesta a valorar la propuesta. Sin embargo, en la mencionada rueda de prensa, ha lamentado que llegara "tarde" y ha advertido que mantenía la candidatura porque no había posibilidad de convocar una asamblea de urgencia de la formación.
El PSC quiere un acuerdo firmado
La respuesta de Sabater no ha acabado de gustar a los socialistas, que ven con recelo tener que votar en el pleno de este martes a la candidata de Guanyem sin tener un acuerdo firmado de reparto de la alcaldía. Además, tampoco ven con buenos ojos que la candidata haya puesto sobre la mesa que la distribución tendría que ser de dos años para Guanyem y sólo uno para el PSC, al considerar que los socialistas ya han gobernado durante este último año. "El acuerdo será de 18 meses para cada uno y estará firmado o no será", ha defendido al mismo Rubén Guijarro en una rueda de prensa telemática esta tarde.
Los socialistas aseguran que su propuesta es "firme", y que tanto el reparto igualitario como el hecho de que el acuerdo esté firmado son piezas imprescindibles para el acuerdo. Así, trasladan de nuevo la presión a Sabater y le avisan de que, si no se acepta las condiciones, presentarán su propia candidatura a la investidura. Además, para acabar de poner presión sobre Guanyem, Guijarro ha enviado la propuesta de acuerdo a todos los grupos para que la firmen antes del pleno de mañana el martes y ha asegurado, en la misma rueda de prensa, que tiene el apoyo del resto de grupos –ERC, comunes y JxCat–.
"Todavía hay juego"
A pesar de este posible jaque mate, desde Guanyem Badalona aseguran que "todavía hay juego" y trabajan para llegar a algún tipo de consenso con los socialistas antes del pleno que permita sacar adelante la investidura de Dolors Sabater. La formación rechaza convocar una asamblea de urgencia porque consideran que sería "trasladar la presión a la asamblea" y generar "tensiones" dentro de la formación y, además, consideran que el mandato de la reunión de la semana pasada fue muy claro. "Presentaremos a Dolors pase lo que pase", defienden fuentes próximas a la exalcaldesa y candidata a la investidura, que apuestan por acabar de negociar como se compartirá la alcaldía con los socialistas una vez pasada la investidura con el "compromiso" de repartirla.
Para sacar adelante cualquier gobierno alternativo al de Albiol, se necesitan los 6 votos de los socialistas, los 4 de Guanyem Badalona, que se presentó a las elecciones en una candidatura conjunta con ERC de la que después se separaron, y que tiene tres concejales más, y los dos de los comunes. JxCat, que tiene un concejal, también ha participado de las negociaciones aunque su voto no es necesario para llegar a la mayoría absoluta. Los republicanos, que tienen una asamblea a las 20h, defienden que si Guanyem y PSC llegaban a un acuerdo, ellos no serán "un escollo para la formación de un gobierno de progreso en la ciudad". Una posición parecida a la de los comunes.
Mañana martes, a las 12 del mediodía, los 27 concejales que confirman el ayuntamiento se citarán para celebrar la sesión de investidura del nuevo alcalde. El pleno extraordinario, sin embargo, no tendrá lugar en el edificio histórico del ayuntamiento, ya que no permitiría mantener las distancias de seguridad necesarias, y se celebrará de manera presencial en el Badalona Centre Internacional de Negocios (BCIN), en las afueras de la ciudad.
"Todavía hay juego"
A pesar de este posible jaque mate, desde Guanyem Badalona aseguran que "todavía hay juego" y trabajan para llegar a algún tipo de consenso con los socialistas antes del pleno que permita sacar adelante la investidura de Dolors Sabater. La formación rechaza convocar una asamblea de urgencia porque consideran que sería "trasladar la presión a la asamblea" y generar "tensiones" dentro de la formación y, además, consideran que el mandato de la reunión de la semana pasada fue muy claro. "Presentaremos a Dolors golpee quien golpee", defienden fuentes próximas a la exalcaldesa y candidata a la investidura, que apuestan por acabar de negociar como se compartirá la alcaldía con los socialistas una vez pasada la investidura con el "compromiso" de repartirla.
Para sacar adelante cualquier gobierno alternativo en el de Albiol, se necesitan los 6 votos de los socialistas, los 4 de Guanyem Badalona, que se presentó a las elecciones en una candidatura conjunta con ERC de la que después se separaron, y que tiene tres concejales más, y los dos de los comunes. JxCat, que tiene un concejal, también ha participado de las negociaciones aunque su voto no es necesario para llegar a la mayoría absoluta. Los republicanos, que tienen una asamblea a las 20h, defienden que si Ganamos y PSC llegaban a un acuerdo, ellos no serán "un escollo|arrecife por|para la formación de un gobierno de progreso en la ciudad". Una posición parecida a la de los comunes.
Mañana martes, a las 12 del mediodía, los 27 concejales que confirman el ayuntamiento se citarán para celebrar la sesión de investidura del nuevo alcalde. El pleno extraordinario, sin embargo, no tendrá lugar en el edificio histórico del ayuntamiento, ya que no permitiría mantener las distancias de seguridad necesarias, y se celebrará de manera presencial en el Badalona Centre Internacional de Negocios (BCIN), en las afueras de la ciudad.