El presunto conseguidor del caso Koldo, Víctor de Aldama, ha presentado este miércoles ante el Tribunal Supremo (TS) un escrito acompañado de documentación con el cual quiere justificar sus acusaciones contra miembros del Gobierno, y especialmente contra el exministro José Luis Ábalos. Entre otras cuestiones, Aldama ha revelado que ofreció a Ábalos un piso de su propiedad -valorado en 1,9 millones de euros- en el paseo de la Castellana de Madrid, a cambio de contratos "preadjudicados" a constructoras, según ha avanzado El Mundo y ha confirmado ElNacional.cat. El exministro y el empresario firmaron un contrato fiduciario para la cesión de este piso como compromiso del primero hacia el segundo de que cobraría comisiones.
En concreto, Aldama explica en el escrito que se "proyectó una operación" por la que Ábalos "adquiriría, sin contraprestación, el inmueble número 164 de paseo de la Castellana". El ministro no tenía la capacidad financiera para comprarlo, puesto que en realidad el piso era una forma de "garantía en favor de Ábalos del cumplimiento del compromiso por parte de determinadas constructoras de abonar comisiones si resultaban adjudicatarias de determinados contratos públicos". El empresario detalla que este acuerdo se concretó en abril del 2019 en un contrato de arrendamiento con opción a compra que expiraba en febrero del 2024, y aclara que Ábalos nunca llegó a ocupar el inmueble citado. "Este contrato permitía al señor José Luis Ábalos asegurarse el cobro de las comisiones futuras. Una vez abonadas, el contrato quedaba sin eficacia, no llegando a ejecutarse una vez que el compromiso se había hecho efectivo", explica el empresario.
En este sentido, recuerda que, tal y como dijo en su declaración voluntaria ante el juez de la Audiencia Nacional "la cantidad de comisiones solicitada por Ábalos era cercana a los dos millones de euros", una cantidad que "no se refería exclusivamente a la adjudicación del contrato de material sanitario a favor de Soluciones de Gestión". Aldama habría aportado la copia original del contrato firmado por Ábalos y él mismo sobre el arrendamiento de este piso, y también ha justificado la existencia de esta operación involucrando al hijo de Ábalos, con quien habría intercambiado mensajes de Whatsapp sobre cómo se haría la transmisión de ese inmueble. En la documentación aportada al Supremo, Aldama ha identificado una decena de grandes obras en autovías adjudicadas por el Ministerio de Fomento en la etapa Ábalos, que habría cobrado comisiones por aprobarlas.
Ábalos niega las acusaciones: "Es un engaño"
Ábalos ha negado las acusaciones vertidas por Aldama y ha calificado de "engaño" las afirmaciones sobre el piso del paseo de la Castellana. El exministro ha asegurado que el empresario logró el inmueble en una subasta y le ofreció después a él. "Nunca se materializó", ha destacado en declaraciones al diario ABC, al tiempo que ha acusado al empresario de aportar "una captura con los contactos de su agenda, pero ni una sola conversación".
En cuanto a los documentos sobre supuestas comisiones de obras en autovías, Ábalos ha reprochado a Aldama haber presentado un documento extraído de los presupuestos generales del Estado, que considera que asegura que no constituyen ninguna prueba. "Es un listado de obras sacado la ficha de presupuestos, coloreado no sé por quién y con tres palabras debajo que debería ver un grafólogo. Dice que es mi letra o la de Koldo. Mi letra está en todas partes, en libros oficiales de toda España y en el extranjero, pero se está comprando la versión de un bandido", ha remachado.
Aldama asegura que facilitó pisos a Ángel Víctor Torres para "encuentros con otras personas"
En el escrito, Aldama también desarrolla parte de sus declaraciones sobre el actual ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, anteriormente presidente de Canarias. El empresario aseguró que el asesor de Ábalos, Koldo García, le habría pedido a Aldama 50.000 euros para Torres, a lo que se negó. "Nos debe una grandísima", le había replicado a Koldo. Ahora, Aldama asegura que con esta afirmación se refería a "las gestiones que había hecho facilitando inmuebles para encuentros de diversa naturaleza en los que participaba junto con otras personas", sin dar más detalles. En particular, asegura que "fue recurrente el alquiler de un piso en la calle Atocha".
Por su parte, Aldama explica que estableció una "relación de interés" con Carlos Moreno, jefe de gabinete de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. El empresario asegura que Moreno le solicitó "oportunidades de inmuebles" porque quería comprarse uno con su pareja, aunque finalmente adquirió uno por otra vía. A su vez, Aldama le pidió el aplazamiento de una deuda tributaria de una empresa ante la amenaza de embargo inminente, algo que se le habría concedido.