Con el reloj de una investidura abocada, a priori, al fracaso, Alberto Núñez Feijóo se ha esforzado en mostrarse como un líder dialogante y abierto a escuchar el resto de partidos e incluso de los presidentes autonómicos de todo el Estado. Esta voluntad del gallego, que solo vetaba a EH Bildu en sus conversaciones, también incluía Junts y el president Carles Puigdemont, ya que los votos de sus 7 diputados resultan imprescindibles para que Pedro Sánchez consiga ser investido de nuevo presidente del Gobierno. Las intenciones de Feijóo, que muchos, entre los cuales Salvador Illa, han cogido con pinzas después de acusar al mismo Sánchez de querer pactar con los independentistas para mantenerse con el poder, no han gustado nada al líder del PP catalán, Alejandro Fernández. El de Tarragona ya contradijo al candidato a la investidura, asegurando que Junts y Puigdemont sí que son sus enemigos políticos y este martes se ha reafirmado en sus declaraciones.
"Por cierto, me ratifico en todo lo que he dicho, sin miedo y convencido de que es lo mejor para España y para el cambio político que tanto necesitamos", ha escrito el líder del PP al Parlamento de Catalunya en Twitter, ahora X. Protagonista de la actualidad en el Estado por su oposición al intento de acercamiento de Feijóo en Junts, su publicación ha recibido decenas de comentarios dándole apoyo, algunos de ellos provenientes de perfiles más próximos a la ultraderecha que le piden que no ceda. Otros también auguran una especie de "purga" entre las filas del PP catalán ante esta actitud de Fernández. Él mismo ha republicado mensajes alabando sus "principios y firmeza". En el último mensaje que había publicado Fernández en este sentido aseguraba que Junts sí que es su rival político y se preguntaba que tenía que hablar el PP con este partido.
Nacho Martín Blanco, al lado de Feijóo
Por otra parte, Nacho Martín Blanco, el cabeza de lista por el cual apostó el PP en Catalunya en las últimas elecciones generales y que se acababa de dar de baja de Ciudadanos, también ha publicado una reflexión en torno a esta polémica, con una tesis más próxima a la de Feijóo. "No se tiene que negociar nada con un partido como Junts en los temas que monopolizan su agenda y que son los parámetros que por desgracia el PSOE se ha dejado imponer en su diálogo con Junts y ERC", advierte a Martín Blanco, pero sin cerrar la puerta a dialogar con los de Carles Puigdemont sobre los temas que "afectan a los ciudadanos de Catalunya". Por todo ello, la exnaranja lamenta que se dé por hecho que el diálogo con Junts se tenga que producir en los términos que decida este partido y no el PP.
En este sentido, y siguiendo la línea de Madrid, Martín Blanco cree que es "razonable y casi una exigencia institucional" hablar con el resto de grupos parlamentarios, dejando fuera de la ecuación en EH Bildu por "higiene moral y democrática". Así, posiciona al lado de Feijóo a la hora de defender este diálogo dentro del marco de la Constitución y sin aceptar "ninguna demanda de la exigencia separatista", a diferencia de Pedro Sánchez, a quién le pide llegar a pactos de Estado para conseguir estabilidad política.