El jefe de filas del Partido Popular en el Parlament de Catalunya, Alejandro Fernández, ha centrado su intervención en el debate de investidura de Salvador Illa buscando el cuerpo a cuerpo con el candidato a president, al cual ha tildado repetidamente de "mentiroso" ante el enfado del socialista, que no ha sido nada receptivo a esta acusación. Además, el del PP se ha centrado, como ya lo hizo en la pasada campaña electoral, en insistir en que el proyecto del PSC para Catalunya no va más allá de repetir una "política procesista que solo traerá la decadencia". Con respecto a la vuelta de Puigdemont esta mañana en Barcelona, Fernández la ha tildado de "espectáculo decadente y dantesco".

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En una intervención precisa, Fernández ha recordado que tanto Illa como el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez "son los únicos responsables del esperpento que estamos viviendo estos días en Catalunya", ya que "resucitaron políticamente a Puigdemont". Por todo ello, ha apuntado al "bochorno" que tiene en frente Illa por su "ansia infinita de poder" y los "cambios de opinión para quedarse en el poder como sea". Por eso mismo, el líder del PP en Catalunya ha advertido a Illa que su intento "de iniciar un nuevo procés hacia la España plurinacional confederal" no será culminado con el éxito, porque la única vía posible es la de una reforma constitucional siguiendo el conducto reglamentario, y no por la "vía procesista de buscar atajos".

"Usted inicia un nuevo procés que no traerá una España plurinacional", ha insistido Fernández, para añadir que el procesismo es "la peor enfermedad política que sufre Catalunya", al mismo tiempo que ha señalado que las políticas de promoción y defensa del catalán asumidas por el PSC en el pacto de investidura con ERC significan "asumir punto por punto toda la retórica separatista" que en opinión de Fernández, se resume en "ir contra el castellano, multando, imponiendo y poniendo espías lingüísticos incluso en las actividades extraescolares", para lanzar una advertencia, esta sí, apocalíptica, ya que ha apuntado que "el uso social del catalán seguirá bajando".

Fernández se autoproclama jefe de la oposición

Por todo ello, y metiendo a independentistas, socialistas y también a los comunes todos en el mismo saco procesista, Fernández se ha autoproclamado jefe de la oposición al afirmar que "nos comprometemos a liderar la oposición", con un programa que se resumiría en el "trabajo bien hecho, los impuestos moderados, el apoyo a los emprendedores, la tolerancia cero a la delincuencia, el apoyo a grandes proyectos ante la cultura del no a todo y la defensa y protección de la España constitucional". En el turno de réplica, el candidato a la investidura, Salvador Illa, se ha mostrado expresamente molesto que se le haya tildado de "mentiroso" y Fernández ha replicado que los socialistas "tienen la piel muy fina".