Álvaro García Ortiz es el nuevo fiscal general del Estado. Él es quien sustituirá a Dolores Delgado, que ha ocupado el cargo desde el pasado 26 de febrero de 2020. Delgado ha anunciado este martes su renuncia de la posición de fiscal general por motivos de salud, según ha anunciado ella misma.

Así es Álvaro García Ortiz, sustituto de Dolores Delgado como fiscal general del Estado

Así pues, García Ortiz será nombrado de esta nueva plaza este mismo martes en la reunión de Consell de Ministres. Se trata del número dos de la fiscal general, considerado "fiel escudero" de Delgado ante las polémicas que lo han enfrentado con gran parte de la carrera. Ocupaba hasta el día de hoy un sitio de especial relevancia para la toma de decisiones del Ministerio Público, como es la jefatura de la Secretaría Técnica.

García Ortiz (Salamanca, 1967) era, hasta este martes, fiscal del Tribunal Supremo y fiscal jefe de Secretaría Técnica en la Fiscalía General del Estado, hasta ahora presidida por Delgado. Ingresó en la carrera fiscal en 1998, después de haberse licenciado en Derecho a la Universidad de Valladolid. Fue destinado, en primer lugar, a la fiscalía de Mahón, donde ejerció de fiscal coordinador entre los años 2000 y 2002. Seguidamente, se trasladó hasta Santiago de Compostela, donde dos años más tarde fue nombrado fiscal especial coordinador de incendios de la comunidad autónoma.

En esta localidad, estuvo a cargo de la investigación de los incendios forestales que asolaron Galicia. Especializado en Medio Ambiente, en aquella época ya señaló que detrás del "90% de los incendios" estaba "la acción humana como causante". Posteriormente, se convirtió el portavoz de Unión Progresista de Fiscales, en la cual todos Delgado también pertenecía. Fue presidente de esta asociación, próxima al PSOE, entre el 2013 y el 2017.

Responsable del 'caso Prestige'

El 'caso Prestige' representa el desastre medioambiental mayor del país. Un caso que no se cerró hasta después de 15 años. En su estancia a la comunidad autónoma gallega, el nuevo fiscal general del Estado fue también el fiscal del hundimiento 'Prestige'. Este caso implicó la investigación sobre la catástrofe mayor, con respecto al ecosistema, en España. El hundimiento del petrolero en las costas gallegas, donde rebosó miles de toneladas de fuel, tardó más de una década en resolverse. Según fuentes gubernamentales se señala que, "en un momento de emergencia climática y medioambiental, se apuesta por una figura que ha dedicado el compromiso profesional al medio ambiente y supone poner el foco en la protección".