Álvaro de Marichalar ha sido absuelto en el juicio por resistencia a los Mossos en una protesta independentista, según la sentencia avanzada por El Mundo y a la cual han tenido acceso tanto Europa Press como ElNacional.cat. El aristócrata había sido acusado de un presunto delito de resistencia a la policía catalana durante una concentración en plaza Sant Jaume el 26 de octubre de 2017, semanas después del referéndum.
La sentencia de la Audiencia de Barcelona constata que Marichalar asistió a la protesta con una pancarta y una bandera española en medio de un grupo de manifestantes independentistas, de manera que un subinspector de Mossos le indicó que la acompañara dentro del edificio "ante el riesgo de que se desencadenara un desorden público y para preservar la seguridad física". Dos agentes lo acompañaron dentro del edificio, cogiéndolo cada uno de un brazo. Una vez dentro, el aristócrata "no quería permanecer en el interior y quería volver a la manifestación, les decía que no eran policías". Uno de los agentes le dio dos empujones y decidieron llevarlo a una sala apartada, pero Marichalar se golpeó la cabeza con una puerta. Eso "comportó que lo redujeran, le pusieran las esposas y después de caer al suelo, lo llevaron a una sala donde quedó sentado".
Sin actitud de oposición
"No apreciemos una especial situación de crispación ni riesgo, cuando se aprecia (...) un ambiente distendido en el cual el acusado hablaba con las personas que se encontraban a su alrededor", dice la sentencia. Y añade: "Tampoco apreciemos una actitud de oposición al ser trasladado al interior del edificio". "Es evidente el desacuerdo y disgusto del acusado, pero esta discrepancia se trasluce en su expresión, en su gesticulación, pero no se puede apreciar actitud física oponiéndose a entrar en el edificio", indica.
Así, el fallo judicial absuelve Marichalar del delito de resistencia — por el cual la Fiscalía pedía una condena de nueve meses de prisión. También lo absuelve del delito de lesiones a los tres agentes de Mossos que intervinieron, entre los cuales hay el ahora inspector Jordi Arasa — que el año 2020 fue apartado del orden público después de una condena por lesiones en las cargas por el desalojo de los indignados del 15-M en plaza Catalunya. El juicio se celebró hace unas semanas, pero el aristócrata no asistió porque se encontraba en Panamá por "motivos laborales". Sin embargo, la petición de la Fiscalía era más baja a los dos años marcados en la normativa para ser obligatoria la presencia del acusado. Así pues, el juicio se celebró sin problemas.