Hay decisiones que pueden salir caras y, con mucha probabilidad es lo que le pasará al Gobierno después de vetar la opa del grupo húngaro Ganz-Mavag sobre Talgo. Este freno por parte del ejecutivo de Pedro Sánchez se ha hecho alegando "intereses estratégicos y de la seguridad nacional de España" pero hay quien va más allá y esgrime, incluso, motivos militares. La prensa de este miércoles se fija en la polvareda que está levantando esta decisión y el ABC titula: "El Gobierno hace frente a demandas millonarias por Talgo". Según el rotativo, la asociación de accionistas minoritarios y Ganz-Mavag ya preparan acciones legales y acudirán a Bruselas para denunciar los hechos. Pero no nos quedemos solo con la información de la portada y abramos el diario donde está el siguiente artículo: "La clave militar con que el Gobierno tumba la opa húngara sobre Talgo". Y es que, parece ser que el fabricante de trenes español cuenta con una patente de cambio de vía automático deseada y envidiada en Europa. Este cambio de vía automático permite a los trenes adaptarse a la circulación en cualquiera de los países europeos. Esta capacidad es muy codiciada por Hungría porque el ancho de vía soviético se mantiene todavía en muchos países del este de Europa. Por su parte, El País relata "el CNI alertó de la conexión rusa del grupo húngaro que licita por Talgo". Este sería el motivo del veto del ejecutivo español y es que Informes de Inteligencia y de Seguridad Nacional inciden en el entramado societario de la compañía, con nexos entre Ganz Mavag y la rusa Transmashholding. Ahora bien, András Tombor, cabeza visible del proyecto húngaro en España, no ha negado nunca estas relaciones, si bien ha argumentado que se cortaron casi del todo después la invasión de Ucrania. Sin embargo, los informes del CNI dudan de que eso sea cierto y defienden que todo se trata de una mera fachada. Veremos.
Si nos fijamos en la portada de El Mundo, veremos la enésima bofetada a la cual tuvo que hacer frente el Gobierno este martes: "Junts abandona el Gobierno en todas las votaciones del Congreso" y apunta que la formación independentista exhibe así "su divorcio del PSOE evitando darle apoyo en ningún asunto: ni inmigración, ni el tren, ni Venezuela, ni igualdad". Este martes Junts abandonó el Gobierno en las 10 votaciones que se celebraron en la Diputación Permanente. Hubo cuatro en que apoyó las peticiones de comparecencia del PP: las que pedían la comparecencia de Sánchez para que explicara sus políticas de inmigración o la situación de Puigdemont, así como de Montero por la financiación singular y Puente por Rodalies. Finalmente, sin embargo, todas las peticiones han caído.
La Razón y El Mundo comparten este miércoles una fotografía muy similar; la de la visita institucional del presidente español en Mauritania. En una comparecencia ante los medios después de reunirse con su homólogo del país africano, Mohamed Cheikh el Ghazouani, Sánchez ha admitido que la necesidad de la inmigración implica "ciertos problemas", y ha hecho énfasis, en este sentido, en el hecho que "hacen falta fórmulas para gestionar el fenómeno de manera segura y ordenada". Así ha asegurado que "el espíritu" de los acuerdos firmados con Mauritania abogan por un "enfoque integral" y por desarrollar un modelo migratorio "regular y circular". El mandatario español ha querido recordar que "hasta no hace tanto" España "también era un país de migrantes", y ha asegurado que el fenómeno de la migración es una cuestión "de principios morales, dignidad y solidaridad". Echemos también un vistazo al resto de portadas de este miércoles: