La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha assegurado este lunes que se limitará el aforo de las concentraciones de la Diada de este año y solo podrán acceder las personas que se hayan inscrito previamente, para poder mantener las medidas de seguridad necesarias ante la pandemia del coronavirus. "No queremos que esta Diada sea multitudinaria. El objetivo no es que sea multitudinaria ni que haya aglomeraciones; al contrario. Pero sí queremos defender el derecho de manifestación y expresión política y dar un mensaje político el 11 de septiembre", ha afirmado en una entrevista para Europa Press.
Paluzie ha detallado que habrá unas 90 concentraciones presenciales en toda Catalunya, en que se respetará "escrupulosamente las instrucciones sanitarias que recomienda el Govern" y que tendrán un aforo limitado en función del espacio y como máximo reunirán a 500 personas. La misma Paluzie ha anunciado también este lunes en la Ser que la mayoría de manifestaciones tendrán una capacidad para 200-300 personas.
A la vez ha anunciado algunas de estas concentraciones en varias localidades de Catalunya como en Salt (200 personas), Figueres (225), plaza Letamendi de Barcelona (200) y una decena más en la capital catalana. Para apuntarse, Paluzie también ha anunciado que se habilitará una página web y que los voluntarios de la entidad dibujaran puntos en el suelo para que la gente sepa donde se debe colocar.
Serán concentraciones estáticas con dos metros de distancia entre las personas, se repartirá gel hidroalcóholico, la mascarilla será obligatoria, las pancartas y carteles serán de uso individual y no se podrán compartir, no se podrá comer durante el acto, e incluso en algunos casos se tomará la temperatura de los participantes.
Entrada solo a los inscritos
La presidenta de la entidad ha destacado que el aforo de las concentraciones estará limitado con un perímetro marcado con una cinta y voluntarios de servicio de orden, que se encargarán de que no acceda ninguna persona que no tenga su número de inscripción: "Se cerrará y no podrá venir nadie que no se haya inscrito previamente".
Así, a diferencia de las manifestaciones de la Diada de otros años, en los que las inscripciones servían para organizar y distribuir la movilización en todo su recorrido, en este caso servirán para limitarla: cada concentración tendrá un número de inscripciones limitado, "que se ha calculado de manera que no haya más de una persona para cada cuatro metros cuadrados".