Cuatro años y medio después de marcharse al exilio en Suiza, la exdiputada de la CUP Anna Gabriel ha reaparecido este sábado en un acto en Sallent en el XII Congreso de CGT en pleno pulso sobre el control del cuarto sindicado catalán. El exlíder de los independentistas se ha dejado ver en el acto celebrado en Sallent, su localidad natal, a la mitad de la pugna para dirigir la plataforma, que se debate entre su alma nacionalista y trotskista y el sector más obrerista y no nacionalista, que está en minoría actualmente. No es el primer acto en el cual asiste a Gabriel desde su vuelta, ya que ya participó, también a Sallent, el pasado mes de octubre en un acto de denuncia contra la represión del Estado.
La aparición de hoy en el congreso del CGT la han confirmado miembros del sindicato, que explican que Gabriel ha acudido al encuentro de lo que servirá para renovar el secretariado de la organización. La exdirigente política se ha marchado con Ermengol Gassiot, secretario general saliente, y ha saludado a los asistentes. La aparición de Gabriel tiene carga simbólica porque CGT, cuarto sindicado catalán después de CCOO, UGT y USO, se debate entre sus dos almas. El sector próximo a la CUP y partidos de izquierdas conseguirá renovar la dirección con la elección de Montse Sánchez, trabajadora dtiene que escoger en este consejo quien será el sucesor de Ermengol Gassiot, secretario saliente del sindicato.
El caso por desobediencia contra Anna Gabriel pasa a la Audiencia de Barcelona
La sala de lo penal del Tribunal Supremo acordó el pasado 18 de enero enviar a la exdiputada de la CUP al Parlamento Anna Gabriel, a juicio por desobediencia a la Audiencia de Barcelona. El alto tribunal confirmó la conclusión del sumario dictada por el magistrado Pablo Llarena en la causa del procés, y ha constatado que no es competente para juzgar a Gabriel, ya que ya no es aforada. Así pues, ha remitido la causa en la Audiencia de Barcelona, el órgano competente para tramitarla.
La exdiputada de la CUP volvió del exilio el 19 de julio y compareció delante de Llarena, que la dejó en libertad. Gabriel devolvió al estado español después de más de cuatro años exiliada en Suiza. Según un escrito del Tribunal Supremo, compareció voluntariamente con la finalidad de ponerse a disposición del alto tribunal y regularizar su situación procesal, después de marcharse fuera a raíz de su implicación en el procés independentista. Después de su comparecencia, el magistrado instructor, Pablo Llarena, decidió citarla para ser interrogada en fechas próximas y con participación del resto de las partes personadas en el proceso. Una vez hecha la citación, quedó en libertad provisional y volvió a Suiza.