Anticatalanismo en grado extremo. Estas son las cuatro palabras más adecuadas para describir el acto de la Fundación Villacisneros para premiar al magistrado del Tribunal Supremo (TS) Pablo Llarena, instructor de la causa contra el procés independentista. La fundación le ha otorgado este premio en "reconocimiento a su trabajo en defensa del estado de derecho, a pesar de los ataques recibidos y por su integridad". "Se lo merece porque ha defendido el imperio de la ley", ha destacado el presidente de la fundación Íñigo Gómez-Pineda durante la ceremonia que se ha celebrado este martes.
Esta fundación tiene como misión defender "el estado de derecho, la unidad de España y el orgullo de ser español", difundir "la verdadera historia de nuestra nación" y luchar "por la dignidad de las víctimas del terrorismo, que representan lo mejor de nuestra sociedad."
Cargas contra Puigdemont y Boye
Las primeras astracanadas han sido a cargo de Dieter Brandau, periodista de esRadio y ganador del premio el año pasado. Brandau ha participado en la ceremonia a través de un vídeo donde ha alabado a Pablo Llarena: "Cuando el prófugo Puigdemont y su abogado condenado por terrorismo, Gonzalo Boye, se querellaron contra Llarena, cuando la Mesa del Parlament cargó contra el juez y cuando los cachorros de la CUP atacaron el domicilio familiar de Llarena, me habría gustado que el gobierno de mi país lo hubiera defendido".
Brandau ha sido implacable contra el gobierno de Pedro Sánchez a quien ha culpado de "no defender a los suyos". Por todo eso ha dado las gracias a la fundación, que sí que ha reconocido la tarea de Llarena.
Después ha sido el turno de María San Gil, la vicepresidenta de la fundación que ha adoptado un tono casposo desde el inicio de su discurso. San Gil se ha referido a las mujeres del juez Llarena y del presidente de la Fundación Villacisneros y les ha dado la enhorabuena "por los maridos que tenéis y por darles apoyo". Hay que añadir que la vicepresidenta ha empezado su discurso subrayando: "Yo, que no soy nada feminista...".
"Defendemos el estado de derecho"
Acto seguido ha sido el turno del presidente Íñigo Gómez Pineda que ha hecho una defensa encarnizada de los valores de su fundación: "Somos una fundación que defiende el estado de derecho, la unidad de España y el orgullo de ser español". Pineda ha recordado la importancia que da "a los valores cristianos" y ha dejado claro que España es su "razón de ser" y que Llarena se merece el premio "por defender el imperio de la ley y la nación española".
Finalmente, ha llegado el turno de palabra al premiado Pablo Llarena que recientemente fracasó en su intento de conseguir la extradición de Carles Puigdemont aprovechando que este viajó al Alguer el 23 de septiembre.
Llarena ha destacado la tarea de un juez que "tiene que intervenir cuando se incumplen las fórmulas de convivencia" y ha añadido que el juez penal "actúa cuando hay un ataque o lesión a valores jurídicos muy diversos". "Este acto es un incentivo a fin de que los jueces sigamos trabajando con responsabilidad, independencia y exclusivamente sometidos al imperio de la ley", ha concluido. Llarena ha asegurado estar muy orgulloso de haber recibido este premio "por defender el estado de derecho".
Foto principal: Imagen de archivo del juez Pablo Llarena / Europa Press